Kenia.

En el lago Victoria navegan a diario unas 25.000 embarcaciones con motor diésel. Para frenar la creciente contaminación de sus aguas, la joven empresa holandesa Asobo está equipando barcos de pesca con motores eléctricos en el pueblo pesquero keniano de Mbita. Estas embarcaciones eléctricas son las primeras de este tipo en el mayor lago de África.

El proyecto funciona con un modelo de alquiler: los pescadores arriendan el motor por algo menos de 40 euros al mes. Además, pagan 150 euros mensuales por la recarga diaria de las baterías. Los pescadores también pueden hacer uso del servicio de reparación que ofrece Asobo.

La pandemia ha ralentizado la puesta en marcha, pero la empresa ha conseguido que 20 pescadores se pasen a las embarcaciones eléctricas. El objetivo de Asobo es sustituir al menos 5.000 motores diésel en el lago Victoria por motores eléctricos en los próximos cinco años.

Objetivo del proyecto

El proyecto de Asobo recibe el apoyo del Ministerio Federal de Medioambiente de Alemania, en el marco de la Iniciativa Internacional para la Protección del Clima (IKI, por sus siglas en alemán), a través de su Programa de Asociación Climática III.

El programa apoya la inversión privada en tecnologías respetuosas con el clima en todo el mundo. El objetivo es promover una economía climáticamente neutra en países emergentes y en desarrollo. Para ello, se promueven proyectos de transferencia de conocimientos para un uso sostenible de las tecnologías.

La duración del proyecto es de diciembre de 2019 a junio de 2022. Su presupuesto es algo menos de 5 millones de euros en total. El programa se ejecuta en 16 países (seis de ellos en África).  La start-up o empresa emergente holandesa Asobo recibe, en Kenia, unos 197.000 euros.

Los socios del proyecto son: Persistent (Climate Venture Builder), Shell, Total, Vitol Foundation, E Waver, Stichting Doen, FMO Entrepreneurial Development Bank (banco holandés para el desarrollo).