China.

La ciudad septentrional china de Tianjin anunció este domingo que efectuará pruebas a sus casi 14 millones de habitantes después de detectar al menos dos contagios locales de la variante ómicron del coronavirus, los primeros que se registran en la parte continental del país asiático. Por ello, pidió a sus ciudadanos que permanezcan en casa o cerca de ella para recibir la visita de los funcionarios y no entorpecer el proceso.

Las autoridades locales indicaron que ambos casos están relacionados, y son parte de los últimos 20 contagios locales detectados en la ciudad, todos en un mismo distrito, por lo que es probable que se detecten más a través de las anunciadas pruebas. Tianjin ya había sido la primera ciudad china en registrar un caso de ómicron a mediados de diciembre, aunque en aquel caso se trató de uno «importado».

A diferencia de entonces, los nuevos casos hallados son de personas que no han abandonado la ciudad en las últimas dos semanas, por lo que se contagiaron necesariamente en ella y no en otra región o el extranjero. Esto es señal de que ómicron ya circula en la zona. Del total de infecciones recientemente detectadas, 15 corresponde a contagios en las escuelas, reportan los medios estatales.

Muchos brotes, pero sin muertes

Las pruebas masivas comenzaron esta misma jornada, a eso de las 7 a.m. (hora local) y se espera que estén completas en unas 24 horas. La urbe confinó 29 zonas residenciales, cerró parcialmente dos líneas de metro y canceló al menos 144 vuelos en el aeropuerto de Binhai, siguiendo la línea de «covid cero” impulsada por el gobierno de Pekín.

Según cifras oficiales, desde el inicio de la pandemia China sólo ha registrado 100.000 casos, de los que fallecieron 4.636, y comenzó 2022 en alerta debido a los diversos brotes detectados desde mediados de octubre del año pasado, que han dejado desde entonces más de 7.000 casos -cerca de 5.000 de ellos, por contagio local-, aunque ningún fallecimiento.

El reputado epidemiólogo Zhang Wenhong, citado por el diario oficial Global Times, negó que la variante ómicron sea menos virulenta que otras mutaciones y afirmó que el mundo solo debería «reabrir» cuando se haya construido una «barrera inmunológica fuerte» y las tasas de mortalidad sean «muy bajas».

Por: Deutsche Welle / EFE / AFP.