China.

Es un brazo articulado que se controla de manera remota y realiza pruebas con un hisopo para detectar posibles casos de coronavirus, en Sinkiang al noreste de China. Su principal ventaja es su precisión en el movimiento y que puede lograr reducir el riesgo de contagio del personal sanitario.

China ha logrado contener la pandemia de COVID-19 en su territorio, no obstante, ha tenido que enfrentar pequeños focos y no había registrado una muerte por este virus en 8 meses.

Por: AFP