Por: Ca­mi­lo Cor­tés-Use­che (Co­lom­bia).

La agradable invitación que recibí tenía como destino el Paraíso, el rumor era que estarían invitados a la gala los representantes de un movimiento de cambio que trascendía nacionalidades desde hace algunos años. Y ese cambio culturalmente me incitaba a la revolución.

El lugar designado era el corazón de la selva mesoamericana, donde además está la flor y nata de las actividades turísticas de una región magnífica. Todos los invitados, que no éramos muchos, pero suficientes para replicar el mensaje nos reunimos en un solo lugar por primera vez.

El primer día mientras esperaba pacientemente en el recinto, los compases de la reunión empezaron a adornarse de la estirpe caribeña con el son cubano, el merengue dominicano, el vallenato colombiano, el calipso trinitense y el reggae jamaiquino. Esos ritmos que cuentan historias reales y mensajes que los interpretes que acudieron al recinto expresan con valentía.

 Para el segundo día la música incitó a movimientos ágiles con el joropo venezolano, la cumbia mexicana, la danza de Tunisia, la samba de Brasil y el flamenco español. La reunión al tercer día se convirtió en una parranda llena de empatía e inspiración para todos los estados americanos, traspasando barreras culturales y de idioma. Fue tal la visibilidad de la parranda en el edén del Paraíso, que muchos curiosos se enlistaron para las futuras ediciones de esta celebración. Una razón más, sin duda para continuar conquistando corazones allá arriba a través de las melodías de los agentes de cambio.

Aquella parranda del Paraíso no será la primera de su estilo, el verdadero evento será la influencia diaria que tengan los interpretes en la cultura popular. Lo cual será, un indicador de liderazgo entre una comunidad que se dedica a la Sostenibilidad y la Responsabilidad Social de forma transversal en el Grupo Iberostar.

Conscientes de que los mares y océanos resultan esenciales para el planeta. En Grupo Iberostar, con más del 80% de los hoteles en primera línea de playa, se están abordando políticas de gestión sostenible y responsable con los entornos en que se desarrolla la actividad, porque se entendió el valioso e impagable intercambio de recursos que mares y océanos ofrecen a la sociedad.

Desde 2017 se ha puesto en marcha una serie de iniciativas que promueven la mejora de los océanos, que se materializaron con el lanzamiento en 2019 del movimiento denominado Wave of Change. Surgió con el deseo de unir a empleados, clientes, proveedores y la sociedad en su conjunto, en el esfuerzo común de crear un turismo cada vez más responsable.

Wave of Change cuenta con tres líneas de acción se despliegan a través de acciones basadas en la rigurosidad científica y objetivos ambiciosos, que dotan de solidez a esta pionera iniciativa. La primera avanzando hacia una economía circular, la segunda fomentando del consumo responsable de pescado y marisco y la tercera mejorando la salud de los ecosistemas marinos y costeros.

Convencido de que las notas de aquel equipo de trabajo son inspiradoras, Heráclito uno de los invitados a la reunión resaltó “Lo único constante es el cambio y el cambio es una constante humana”.

En síntesis, la invitación y posterior reunión que recibí, ha sido una prueba más y de las mejores, que los corazones por diferentes que sean se pueden abrir, que los oídos pueden escuchar melodías extrañas y sentir, y que la música como las ideas son tan diversas y espontáneas que ponen a cualquiera a bailar. Eso sí, todo eso con un resquicio de libertad y el poderoso sentimiento del amor.

***

Ca­mi­lo Cor­tés  Use­che es Bió­lo­go Ma­rino. Maes­tro en Ma­ne­jo de Eco­sis­te­mas Ma­ri­nos y Cos­te­ros, doc­tor y post doc­tor en Cien­cias Ma­ri­nas. Su in­ves­ti­ga­ción en el área de la eco­lo­gía ma­ri­na en la Re­pú­bli­ca Do­mi­ni­ca­na le va­lió el re­co­no­ci­mien­to del “Pre­mio Dr. Alon­so Fer­nán­dez Gon­zá­lez 2020” a las Me­jo­res Te­sis de Pos­gra­do del Cin­ves­tav en la Ca­te­go­ría Doc­to­ra­do. For­ma par­te del mo­vi­mien­to Wave of Chan­ge del Gru­po Ibe­ros­tar, como Coas­tal Health Re­gio­nal Ma­na­ger, don­de tra­ba­ja en la sa­lud Cos­te­ra en la re­gión Ca­ri­be, lle­van­do a cabo in­ves­ti­ga­ción cien­tí­fi­ca.