Pekín.

China lanzó este jueves con éxito un vehículo espacial reutilizable, que permanecerá en órbita «durante un tiempo» antes de volver a un lugar designado en la Tierra.

La nave espacial fue puesta en órbita por un cohete Larga Marcha-2F desde el centro de lanzamiento de satélites de Jiuquan, en el oeste de China, informó en las últimas horas la agencia oficial Xinhua.

Este vehículo, que se diferencia de las naves espaciales tripuladas Shenzhou y de los vehículos de carga Tianzhou, que solo pueden usarse una vez, «llevará a cabo la verificación de la tecnología reutilizable y experimentos de ciencia espacial con el fin de proporcionar apoyo tecnológico para el uso pacífico del espacio», recogió la agencia.

China lleva años desarrollando vehículos espaciales reutilizables, con el fin de reducir los costes de lanzamiento y aumentar la frecuencia de las misiones espaciales.

El pasado mayo, un vehículo espacial reutilizable experimental regresó a China tras permanecer 276 días en órbita.

El éxito de aquella prueba marcó «un avance importante en la investigación de tecnología de naves espaciales reutilizables» y «proporcionó una forma más conveniente y económica de ir al espacio y regresar».

Previamente, el país asiático había completado una prueba de aterrizaje vertical de un cohete en una plataforma marina, lo que sentó los cimientos para la recuperación de los lanzadores y su posterior reutilización.

Otras empresas como la estadounidense SpaceX han desarrollado partes recuperables en los últimos años.

En la última década, Pekín ha invertido fuertemente en su programa espacial y ha logrado hitos como el alunizaje exitoso de una sonda en la cara oculta de la Luna en enero de 2019, un logro que ningún país había conseguido hasta la fecha, o la construcción de una estación espacial.