La FIL rinde homenaje a José Saramago por el centenario de su nacimiento

Guadalajara, Jalisco.

En la Feria Internacional del Libro de Guadalajara (FIL) se llevó a cabo la conferencia “Homenaje a José Saramago”. Estuvieron presentes Laura Restrepo, Paulo José Miranda, Pilar del Río, Marisol Schulz Manaut, y como moderadora Mayra González. 

El  16 de noviembre de este año se cumplió  el centenario del nacimiento del escritor portugués José Saramago, quien en 1998 obtuvo el Premio Nobel de Literatura y fue el primer escritor portugués en conseguirlo. 

Saramago estuvo presente varias veces en la FIL. Su paso por la Feria lo volvía un verdadero rockstar la gente se detenía para saludarlo, para tomarse una foto con él, para un autógrafo, según contó Marisol Schulz Manaut, directora de la Feria Internacional del Libro de Guadalajara y directora de la Feria del Libro en Español y Festival Literario de Los Ángeles. 

“Saramago se quedaba a firmar hasta el último lector. Se entregaba a sus lectores y tenía un compromiso con sus lectores. Este es el ser entrañable con el que yo me quedo”, dijo Schulz Manaut. 

El 18 de junio de 2010 falleció Saramago, pero sus obras literarias, su voz en la política y sus ideas, siguen presentes.  

“Saramago murió un 18 de junio y  Monsiváis un día después. Y un periódico de México publicó un titular que no olvidaré:  Monsiváis no quiso vivir en un mundo sin Saramago”, contó Pilar del Río, periodista y traductora española. 

Es un inmenso escritor querido en América Latina y siempre estuvo comprometido con el género humano. Por todo ello, la Feria Internacional del Libro de Guadalajara le rinde un muy sentido homenaje. 

“No me cabe duda que el escritor no latinoamericano más cercano al corazón de los latinoamericanos siempre fue José Saramago”, detalló Laura Restrepo, escritora y ganadora del Premio Grinzane Cavour 2006 a la mejor novela extranjera publicada en Italia.

“Es el portugués más mexicano”, acentuó Marisol Schulz Manaut

Saramago, la política y la dignidad

José Saramago tenía la habilidad de colocarse en las antípodas del poder. Cualquier cosa que él dijera o escribiera estaba en el polo opuesto del poder. Desde ahí lograba expresarse en términos tan profundamente humanos. 

“Recuperaba cosas para nosotros, y en particular a los latinoamericanos que siempre hemos estado un poco al margen de todo este boom de prosperidad y seguridad que ha vivido el primer mundo”, destacó Laura Restrepo. 

Toda la literatura de Saramago, es una literatura de dignidad para América Latina. Es una noción en la pobreza, en medio de la guerra y de los desastres naturales. 

“Siempre veía por la dignidad del ser humano, ese valor para enfrentar las circunstancias. Esos son los libros de Saramago. Sea lo que sea la presencia digna del ser humano. Yo creo que Saramago fue un escritor profundamente político. Y en América Latina la política es para nosotros una necesidad,  porque siempre ha tenido que ver con la urgencia de cambio, con la búsqueda de libertad, de democracia y de dignidad”, subrayó Restrepo.

Pero, ¿qué es la democracia para Saramago? Según su compañera, Pilar del Río, es más que votar. 

“José Saramago decía que democracia no es votar cada cuatro años, que no vale con delegar en personas que consideramos capacitadas para que nos gobiernen, que tenemos que ser activos todos los días. Y sus libros son dignidad, como dijo Laura Restrepo, pero también reclaman el poder. No el poder de las industrias armamentísticas, sino el poder cívico. El poder que hace que tengamos buenos o malos gobiernos”, relató Pilar del Río. 

Saramago fue periodista y miembro del Partido Comunista Portugués. El escritor sufrió censura y persecución durante los años de la dictadura de Salazar. Se sumó a la llamada Revolución de los Claveles que llevó la democracia a Portugal en el año 1974.

“José Saramago, no solamente mostró lo que quería mostrar, sino mostró aquello que todos nosotros que no tenemos voz queríamos mostrar”, concluyó Paulo José Miranda, ganador del premio José Saramago.

Por: Itzel Inda/NCC Iberoamérica