La telemedicina es una herramienta útil y menos costosa para ofrecer cuidados paliativos a pacientes con cáncer avanzado y de bajos recursos, según un grupo de investigadores en México.

El grupo, adscrito al Instituto Nacional de Ciencias Médicas y Nutrición Salvador Zubirán de Ciudad de México, probó la telemedicina, especialmente las consultas por videollamada, en 45 pacientes de bajos recursos, para ofrecerles atención psicológica, control del dolor y de síntomas, así como asesoramiento nutricional durante tres meses de la pandemia.

Los investigadores concluyeron que implementar un programa de atención basado en telemedicina es viable en países de bajos o medianos ingresos; y para limitar el riesgo de contagio durante una emergencia sanitaria como la causada por el nuevo coronavirus.

Con la pandemia por COVID-19, “tuvimos que cerrar muchas consultas y la atención se centró en las personas con esta infección, así que quisimos mantener la atención a pacientes con cáncer avanzado y empezamos a contactarlos por vía telefónica para ver qué necesidades tenían”; dijo vía Zoom Yanin Chávarri Guerra, investigadora en ciencias médicas del Instituto y autora principal del estudio publicado en The Oncologist.

Detalles sobre las intervenciones

A través de su programa de atención Te acompañamos, el grupo realizó un total de 163 intervenciones entre marzo y junio de 2020; incluyó atención para control del dolor, ansiedad, fatiga, depresión y malnutrición.

Los pacientes fueron en su mayoría personas de edad avanzada, principalmente con cáncer gastrointestinal o de mama; 57 por ciento fueron mujeres; 15 por ciento eran habitantes de zonas rurales, mientras que 27 por ciento tenía educación escolar inferior o igual a la primaria.

A pesar de que registraron problemas en la comunicación como interrupciones, mala conectividad o calidad deficiente de audio o video, “fue una experiencia positiva porque aún cuando estamos en un país de recursos medianos es algo que se puede lograr porque la mayoría de las familias mexicanas tienen dispositivos de comunicación, dijo Chávarri.

Ante la emergencia generada por la pandemia muchos gobiernos apelaron a tecnologías de comunicación e información para facilitar las consultas. En la foto, la plataforma oficial sobre coronavirus de Brasil.

Algunos estudios estiman que solo en este año habrá un 20 por ciento más de muertes de personas con cáncer en Estados Unidos e Inglaterra, a causa de la pandemia.

“La COVID-19 ha afectado a los pacientes de cáncer en todas las esferas. Ha habido un retraso en el diagnóstico, problemas en el tratamiento y en los pacientes en cuidados paliativos”; dijo por WhatsApp, la oncogenetista del Instituto Nacional de Cancerología (INCan) de México, Talía Wegman-Ostrosky, quien no participó en el estudio.

“Para muchos pacientes en México, el trasladarse a su lugar de tratamiento es complicado porque muchas veces no están ni en la misma ciudad, entonces ir al centro es un riesgo tanto para ellos como para sus cuidadores, además del gasto económico que puede representar el traslado”, añadió.

La telemedicina llegó para quedarse

Ese fue el caso de Daniel Carrasco, una de las personas que usaron la telemedicina para recibir atención por parte de los médicos del Instituto con el fin de poder atender a su mamá, diagnosticada con cáncer de ovario a inicios de 2020.

Daniel, originario de una pequeña ciudad en el estado de Guerrero, al sur de México, no solo recibió apoyo y asesoría a través del teléfono y aplicaciones como Google Meet, para su propia sorpresa, él y una amiga enfermera también recibieron un entrenamiento por videollamada para colocarle un catéter a su mamá y que pudieran administrarle suero por esa vía.

“Mi mamá murió tres días después, pero estuvo mucho más tranquila. Creo que la tecnología está para estas cosas, cuando es complicado que tengamos una consulta física. La tecnología me ayudó bastante para que mi mamá recibiera la misma atención que le hubieran dado en el hospital. Gracias a los servicios de telemedicina pudo tener una muerte digna”, contó Daniel por Zoom.

“La telemedicina llegó para quedarse”, concluye Wegman-Ostrosky. “Evita gastos de traslados, tiempos de espera, aglomeraciones en hospitales. Hay muchas especialidades en las que definitivamente es muy complicado pensar en telemedicina, pero para otras tantas nos puede resolver muchos problemas tanto a los servicios médicos como a los pacientes. Puede servir para todo Latinoamérica, para que podamos llevar medicina a lugares donde no la hay”.

A pesar de que en México ha habido otros esfuerzos para ofrecer ayuda vía telefónica a pacientes con crisis emocionales o adicciones por efectos de la pandemia, este es el primer esfuerzo por parte de una institución de tercer nivel para ofrecer consultas vía remota a pacientes con cáncer avanzado.

Enlace al estudio en The Oncologist

Por: Scidev América Latina, Aleida Rueda.