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¿Qué pasó en Ohio? Te contamos las consecuencias del accidente

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México.

El viernes 3 de febrero, la vida cambió para los pobladores de East Palestine, Ohio. El cielo fue cubierto por una densa nube negra que los obligaría a evacuar sus hogares. ¿La razón? El descarrilamiento e incendio de un tren que transportaba químicos tóxicos entre los químicos que pusieron a temblar autoridades y pobladores, destacó el cloruro de vinilo, conocido por su alta explosividad y peligro.

“¿Por qué es peligroso? Porque cualquier fractura provoca una fuga. Rápidamente pasa de líquido a gas con una alta presión y puede provocar una explosión. Es tóxico, pero además tiene la particularidad de que es más pesado que el aire. Entonces tiende a depositarse en las partes bajas a nivel de piso y a partir de ahí pues se va acumulando más arriba dependiendo de la cantidad”, detalló el docente, Benjamín Ruiz Loyola.

A los pocos días de lo sucedido, las autoridades indicaron que ya era seguro para los habitantes regresar a sus hogares. Sin embargo, muchos han reportado presentar malestares físicos. No obstante, expertos mencionan que el riesgo solo es alto al estar en la zona del accidente. Poco tiempo después de sucedido. Al pasar los días, este disminuye.

“Al desplazar al oxígeno, la gente empieza a presentar síntomas de asfixia. Si es una persona con problemas de tipo respiratorio, entonces sí puede tener problemas agravados. Alguien que sufre de asma va a tener ataques de asma más fuertes o más frecuentes por haber estado aspirando el cloruro de vinilo. Pero en general, a largo plazo, inclusive es desconocido cuál pudiera ser el efecto porque no se han hecho pruebas suficientes”, dijo Ruiz Loyola.

De acuerdo con el profesor de la Facultad de Química, el cloruro de vinilo es arrastrado por el aire y se diluye, lo que disminuye su peligrosidad. Para descartar riesgos se han realizado diferentes pruebas en las cercanías del sitio, verificando que las condiciones ambientales son aceptables para la salud.

“El cloruro de vinilo no es soluble en agua. Entonces, difícilmente va a haber contaminación en el agua. El mayor problema es la contaminación en el aire. Y lo que se hace normalmente es tomar muestras de aire en diferentes lugares y a diferentes alturas y se lleva a una técnica que se llama cromatografía de gases para determinar la concentración de cloruro de vinilo que vaya quedando. Y hasta que el cromatógrafo de gases nos diga que es seguro, se puede regresar”, concluyó Ruiz Loyola.

Por: TV UNAM.

Noticiero Científico y Cultural Iberoamericano – Noticias NCC
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