Panamá.

La decimocuarta edición del Festival de Diablos y Congos se llevó a cabo en la ciudad panameña de Portobelo, en la provincia de Colón, para resaltar el legado de los ancestros que liberaron de la esclavitud a la población local de origen africano en la época colonial.

El Festival de Diablos y Congos, desarrollado en la Nación de América Central, es considerado desde 2018 como Patrimonio Cultural Inmaterial de la Humanidad por parte de la Organización de las Naciones Unidas para la Educación, la Ciencia y la Cultura, UNESCO.

La Viceministra del Ministerio de Cultura de Panamá, Ariane Benedetti, comentó que esta actividad se reproduce para mantener el legado histórico, así como mostrar la cultura de los antepasados vigente en bailes y vestuario. 

“Y por eso el gobierno ha estado ahí y se une para tratar de que este festival no solamente se conozca en Colón, no solamente se conozca en Portobeelo, no solo se celebra aquí, sino que más panameños puedan venir y vivir esta experiencia donde vas a tener a flor de piel la tradición, la historia, la gastronomía, los bailes, las máscaras, la única forma de lograr que las tradiciones, que la cultura, que la historia panameña se conozca y se ame, es dándola a conocer. Y de eso se trata el festival”, destacó Benedetti. 

La cultura Congo mantiene vigentes, valores, representaciones y tradiciones de pueblos de origen africano manifiestas en los descendientes de esclavos negros rebeldes de la época colonial en América Latina y el Caribe.

El Festival de Diablos y Congos de Panamá es una celebración vía anual que cuenta además con otras actividades paralelas como exposiciones de máscaras y artesanías, sin faltar la feria gastronómica con platos típicos de la zona de la Costa Panameña.