Colombia.
Fotos de una ecografía de una vida a los seis meses y el rostro del bebé que Daniela, madre de tres, pronto dará a luz pero esta vez no se quedará con el bebé. Ella lleva a cabo un embarazo subrogado en Bogotá para una pareja en Estados Unidos. En su familia pocos lo saben por eso prefiere quedar en el anonimato.
“Todo esto es un proceso que lleva a una retribución mutua, a una ayuda mutua que es el bebé y ellos pues también nos ayudan a nosotras que puede servir. Hay muchas chicas que pueden decir: “nos puede servir para montar un negocio, para poner un local”. Yo llevaba sin trabajo desde la pandemia entonces cuando me enteré, y o dije: “estaría chevere y pues voy a estar con mis hijas y a estar en casa””, comentó Daniela.
Al finalizar su embarazo, Daniela recibirá un total de 4 mil euros. El precio en Colombia es bastante económico comparado con el de Estados Unidos y Europa, donde las madres de alquiler reciben decenas de miles de euros. En el país suramericano los embarazos subrogados pagados no están prohibidos, un mercado en auge con un vacío legal.
Tras varios intentos, Colombia discute de nuevo una Ley que podría regular esta práctica, pero sólo como un acto altruista, sin un pago, del que quedarían excluidos los extranjeros, la mayoría de los clientes. Para la abogada en derechos humanos María Cristina Hurtado, no basta, exige un veto completo a esta práctica.
“Un gobierno no puede regular una práctica que es violatoria de los derechos humanos. Es una práctica que ha dado lugar al abandono, a peligro, a indefensión, a redes de trata y tráfico alrededor del cuerpo de los niños y de las niñas. A explotación sexual. Esto es muy importante tenerlo en cuenta”, apuntó.
Para gestar un hijo para otras personas, las mujeres se deben realizar tratamientos hormonales sin saber cómo reaccionará su cuerpo.
Una ley regulatoria
Deutsche Welle pactó una entrevista con el Ministerio de Justicia, entidad que propone la nueva ley, pero la cita fue cancelada en el último momento. El congresista, Alejandro Campos, quien pide a la corte constitucional que se pronuncie al respecto, dice que regular el embarazo subrogado es un comienzo.
“Cuando tú metes el tema de que el subrogado se regula, el centro médico tiene que decirnos “de quién es hijo”, y te va a aparecer la casilla del subrogado y ya tendremos control de quién es subrogado, pero ya no se va a permitir o ya no hacer fácil que tú puedas sacar un niño de Colombia si no es el hijo tuyo. Y los médicos y las personas que practiquen estas prácticas sin el cumplimiento de la norma, le vamos a marcar cárcel y multa”, explicó.
Madres de alquiler como Daniela están de acuerdo en que haya nuevas reglas, pero también quieren poder decidir que es mejor para ellas. Ella se siente segura y feliz de ayudar a la pareja estadounidense y quizá pueda abrir pronto un negocio propio.
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