Tailandia.

Las personas vacunadas procedentes del extranjero que lleguen a partir de este domingo a Tailandia y Birmania quedan exentas de guardar un periodo de cuarentena, una medida que tiene por objetivo ayudar al sector del turismo.

Los viajeros, no obstante, deberán a su llegada someterse a un test rápido para detectar la covid-19.

Tailandia, donde el turismo es uno de los grandes motores de la economía, da un paso importante para completar el proceso de apertura, que se vio afectado a finales de 2021 por el envite de la variante omicrón.

La covid-19 ha causado estragos en el sector turístico, que antes de la pandemia, declarada oficialmente en marzo de 2020, representaba entre el 12 y el 20 por ciento del PIB tailandés.

Las autoridades tailandesas además reducirán de 20.000 a 10.000 dólares la cobertura mínima del seguro sanitario, mientras que las personas no vacunadas todavía tendrán que permanecer aisladas tres días en uno de los centros habilitados.

Por su parte, el Ministerio de Salud de Birmania anunció el viernes la nueva regulación que exime de cuarentena a las personas que lleguen al aeropuerto internacional de Rangún en vuelos comerciales.

El país, que se encuentra sumido en una profunda crisis política y social a raíz del golpe de Estado perpetrado por los militares el 1 de febrero de 2021, fue precedida por la reapertura desde el 17 de abril de las llegadas desde el extranjero.

La oposición al régimen castrense opina que con este movimiento los golpistas buscan aparentar una estabilidad en el país que no existe, dado los numerosos conflictos armados e inestabilidad social que ha brotado desde la sublevación militar.

Birmania acumula 613.000 infectados con la covid-19 y 19.434 fallecidos, datos oficiales son puestos en duda por la disidencia, mientras que la vacunación alcanza solo al 42,5 % de la población con la pauta completa y un 55,4 % con al menos una dosis.

Mientras que Tailandia ha registrado 4,26 millones de casos y 28,617 muertos, con un ratio de vacunación completa del 73,2 % de toda su población y el 80,3 % con al menos una dosis.