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Cabo Tuna: el proyecto que busca llegar al espacio desde territorio mexicano

Published 1 año ago Equipo Editorial NCC1 año ago • Bookmarks: 33

Fotografía: Miriam Jiménez Cabrera / NCC Iberoamérica

San Luis Potosí, México

El 28 de diciembre de 1957, el estado mexicano de San Luis Potosí presenció el despegue del cohete “Física I”: un experimento que fue capaz de elevarse por primera vez sobre el altiplano de esta región del país, dando la bienvenida a la era espacial mexicana. Esto ocurrió bajo un nombre que ha trascendido en la historia científica del país: Cabo Tuna.

Este proyecto liderado por el Instituto de Física de la Universidad Autónoma de San Luis Potosí (UASLP), se desarrolló de manera previa a los primeros hitos aeroespaciales a nivel mundial.

Al respecto, el Dr. José Luis Arauz, Director de Cabo Tuna, resaltó la relevancia de este acontecimiento y su relación con el contexto histórico e internacional:

“Se inicia de una manera muy importante, pues se hicieron lanzamientos en territorio mexicano, antes que la creación de la NASA. En ese mismo año, unos meses antes, se logró poner en órbita el Sputnik1, el primer satélite artificial, que fue desarrollado por la URSS. Podríamos decir que ese fue el inicio de la era espacial en el planeta. Ese mismo año nace Cabo Tuna.”

En sus orígenes, esta iniciativa espacial fue impulsada por el Director del Instituto de Física, el Dr. Gustavo Del Castillo y Gama. Según palabras de Arauz, la intención inicial de esta investigación era producir lluvias, “(…)entonces hicieron lanzamientos de cohetes de pirotecnia, cargados con una sustancia de plata para hacer llover. Fue hasta despupes que se abocaron a la aventura de hacer cohetes espaciales. A iniciar esta carrera de cohetería en San Luis Potosí”.

La primera etapa de Cabo Tuna tuvo lugar de 1957 a 1972, donde se logró el diseño, construcción y lanzamiento de cohetes de 1 y dos etapas. Sin embargo, el proyecto se detuvo por falta de recursos y apoyos económicos.
Al respecto, José Luis mencionó lo frecuente que es esta situación, sobre todo en las áreas científicas: “Muchos proyectos muy importantes nacen y se desarrollan por el interés de quien los impulsa, de la gente que lo hace, pero después no se siguen esos proyectos porque no consiguen el financiamiento adecuado”.

México hacia el espacio

Sin embargo, después de 44 años desde su último despegue, Cabo Tuna revivió en 2016 por iniciativa del experto en cohetería, Gerardo Saucedo.

Desde entonces, se han realizado dos experimentos de lanzamiento con los cohetes Fenix 1-1 y Fenix 1-2, logrando con este último un lanzamiento exitoso de casi 10 kilómetros de altura.

No obstante, su meta principal es clara: trascender una vez más en la historia de las ciencias en México y llegar al espacio por primera vez dentro de territorio nacional.

Uno de los proyectos más ambiciosos para esta nueva etapa de Cabo, es la construcción de un cohete que genera un alcance de 50 kilómetros. Pero el proyecto no busca quedarse ahí: “Es un cohete que llevará un dardo, y esperamos que el dardo salga a 100 kilómetros, es decir, puede que alcance el espacio, porque la definición de espacio ultraterrestre o espacio exterior, es a partir de los 100 kilómetros”

La misión es que el dardo alcance los 100 kilómetros y con esto se logre la meta de salir al espacio. “Esto lo convertiría en el primer objeto lanzado desde México, en realizar esta hazaña”, concluyó Arauz.

Por: NCC Iberoamérica / Miriam Jiménez