El origen de la pandemia, un misterio cinco años después de que marcó al mundo

China.

Cinco años después de que estallara la pandemia que puso en jaque al planeta, el origen de la Covid-19 continúa siendo un misterio. La Organización Mundial de la Salud (OMS) sigue reclamando a China más información, mientras Pekín asevera que ya ha entregado todos los datos de los que dispone.

En Wuhan, ciudad de donde se reportaron los primeros casos, la vida ha vuelto a la normalidad, sin embargo, el mercado de Huanan en donde algunas teorías apuntan como el lugar donde pudo comenzar el contagio, sigue completamente sellado y celosamente vigilado por guardias de seguridad. Poco después de que se informara de los primeros casos del entonces llamado brote misterioso de neumonía, el mercado cerró sus puertas en enero de 2020, tras detectarse la propagación de contagios de vendedores y clientes. Apenas un día antes el gobierno chino había informado a la Organización Mundial de la Salud de la detección en Wuhan de los primeros casos, pero para entonces, el coronavirus ya se transmitía a toda velocidad.

En el mercado de Huanan ya no queda rastro de los investigadores enfundados en monos blancos de protección recolectando muestras, ni de comerciantes, ni de los clientes que antaño abarrotaban el mercado al aire libre en el que se podía comprar desde frutas y verduras hasta carnes frescas, mariscos, hierbas y especias. Ahora solo quedan en activo algunos establecimientos aledaños. Así fueron los primeros compases de una crisis sanitaria cuyo origen todavía no está claro.

El pasado diciembre, la propia Organización Mundial de la Salud volvió a pedir a Pekín transparencia sobre la secuencia genética de los primeros casos en el mercado y de los trabajos llevados a cabo en los laboratorios de la ciudad.

Según el director general de la OMS, mientras no haya datos completos, todas las hipótesis están en el aire, incluyendo la teoría de que el coronavirus se escapó de forma accidental de algún laboratorio de bioseguridad chino, lo que según los científicos del organismo que visitaron el país, era la menos probable de las hipótesis, pero no completamente descartable.

Sin embargo, China asevera que ha apoyado activamente la investigación mundial sobre el coronavirus y que los expertos de la OMS que visitaron el país fueron a todos los lugares que querían ir, conocieron a todas las personas que querían conocer y vieron todos los materiales que querían ver.