Jalisco, México.
Las diversas manifestaciones ayudan a que las personas detecten esta enfermedad. El acompañamiento profesional es necesario, pero no suficiente.
El estrés continuo que estamos viviendo durante la pandemia puede llegar a generar depresión o algún otro problema emocional. “La incertidumbre, el miedo, la frustración estuvieron más presentes. Cuando el humano vive una situación de peligro, busca el contacto físico para suavizarlo, sin embargo, por obvias razones, la pandemia lo ha impedido y ha vuelto difícil la gestión de estas emociones”, explicó Marcia Olhaberry, doctora en psicoterapia de la Pontificia Universidad Católica de Chile.
El 23.6 por ciento de chilenos presentan algún trastorno mental. El 45 por ciento de los chilenos dicen que su estado emocional ha empeorado con la pandemia. Aunque no todo malestar sea sinónimo de depresión, debemos analizar diversos indicadores.
Por su parte, la doctora en psicología y salud, Blanca Barcelata, resaltó que los adolescentes son particularmente afectados. “La tendencia de depresión y ansiedad es clara, pero hay variabilidad de la respuesta ante esta situación de la COVID-19. El nivel de salud mental previo, es un ejemplo de la variabilidad”.
Cada grupo etario tiene distinta vulnerabilidad, finalmente la salud mental es producto de la interacción dinámica: desde lo biológico hasta lo contextual. “El afrontamiento es un recurso importante. El distanciamiento social ha afectado más a los menores porque en esta etapa es muy importante para su desarrollo personal”, agregó Barcelata.
Los efectos primarios de la pandemia mayormente están asociados a los daños que causa a la salud física, pero las afectaciones a la salud psicológica también son visibles. En esta contingencia, Olhaberry comentó que hay un agravamiento en quienes ya presentaban sintomatología emocional antes de la pandemia.
“Al inicio, se interrumpió el tratamiento de muchas personas, por lo que empeoró la sintomatología. En el caso de los niños, estos perdieron sus redes: colegios, redes infantiles y las relaciones familiares se intensificaron”.
Se aceleró una cascada de líos, sobre todo cuando se llevaron muchas actividades a casa, “no es lo mismo contar con todas las posibilidades para llevar a cabo las actividades escolares y laborales, que no tenerlas. Los grupos más golpeados fueron los que económicamente son más vulnerables”, aportó Blanca Barcelata.
Puntos clave para detectar la depresión
¿Cómo podemos detectar si es una reacción emocional esperada o si es una desviación emocional? Blanca Barcelata compartió que hay tres indicadores importantes: la frecuencia con la que aparece esa emoción, la intensidad y la duración.
De igual forma, Rodrigo Moreta, profesor de la Pontificia Universidad Católica de Ecuador, coincidió con vigilar estos tres indicadores. “Aunque, si los factores que afectan suelen ser constantes y no se pueden resolver, pueden causar una respuesta psicológica depresiva”.
También hay otra forma de detectar conductas depresivas y tiene que ver con el tiempo. Marcia Olhaberry mencionó que cuando la pérdida de apetito, la aparición de esas emociones, la pérdida de peso, la falta de energía e interés en las cosas que quieres, entre otros indicadores, agregando a las ideas depresivas como el suicidio duren más de dos semanas, estamos ante un cuadro depresivo al que hay que poner atención.
Hábitos para cuidar la salud mental
Los hábitos para cuidar la salud mental no están socializados. “No tenemos esa misma visión de salud mental, no los entrenamos ¿Cuáles podemos practicar? Comunicación asertiva, que aprendamos a manejar las emociones, desarrollar la reflexividad ante la vida, aprender a canalizar el estrés, acostumbrar a pensar soluciones ante problemas”, sugirió.
Es el momento de generar buenos hábitos de salud mental: cultivar relaciones sanas y constructivas, asumir posturas resolutivas, evitar el estrés y la ira innecesaria.
Nos hemos enfocado mucho en la salud mental, sin embargo también podríamos pensar más en salud integral, sin dualizar la salud física por un lado y la mental por otro. “El mantenimiento de la salud física, también contribuye a una buena salud mental”, señaló Blanca Barcelata.
Y para entender de qué manera la salud física aporta a la salud mental, la psicóloga explicó que hay dos tipos de depresión: la endógena y la exógena. “La primera tiene que ver con un problema de tipo biológico que genera la depresión, una limitación neurológica o del sistema nervioso. La segunda es ocasionada por un factor externo: como la pérdida de un ser querido”.
Por ello, la actividad física resulta una buena terapia, ya que se liberan neurotransmisores y sustancias que hacen que nuestro sistema funcione mejor.
Gestión de emociones en niños y adolescentes
Mientras más pequeños son los niños, menos herramientas tienen para gestionar sus emociones, por ello el acompañamiento es importante. Sin embargo, para que esto resulte, necesitan un vínculo seguro, no se podrá hacer con cualquiera.
Como padres, ¿cómo puede mejorar esta situación? “Primero, hay que favorecer la confianza: si no hay confianza, no hay vínculo. Segundo, transmitir que la relación es incondicional: si están tristes o enojados, aseguren que estarán ahí para ellos y que de verdad queremos y estamos disponibles”, recomendó Marcia.
Pensar sobre qué le pasa al niño por dentro de manera genuina es relevante. “Mostrarse curioso, ser conscientes de que no saben todo y escuchar sus necesidades. Todo esto es importante para enfrentar situaciones de crisis”, agregó.
Los padres son muy importantes en el desarrollo de niñas, niños y adolescentes. Blanca consideró que son los propios padres quienes deben hacerse una autoevaluación para después reconocer cómo están enfrentando las adversidades ellos mismos. Y replicar este modelo con sus propios hijos.
Por último, Rodrigo coincidió en la necesidad de que los padres procuren el autoconocimiento y, con ello, supervisen el comportamiento de los menores. “El mensaje para los padres es no dudar cuando vemos cambios de conductas y acudir con un especialista. Las redes de apoyo son importantes: amigos, familiares cercanos, la pareja. En la salud, debemos superar esa barrera que nos hace creer que no necesitamos ayuda”.
De esta manera concluyó la edición de enero de #DiálogosNCC: “¿Qué hacer ante la depresión?”, en el marco del Día Mundial de la Lucha Contra la Depresión.
La siguiente edición se llevará a cabo el 11 de febrero con el tema: “Vocaciones científicas en Iberoamérica”, en el marco del Día Internacional de la Mujer y la Niña en la Ciencia.
Por: Leslie Almanza / NCC Iberoamérica.
- El Webb detecta CO2 y agua oxigenada en la luna más grande de Plutón - octubre 2, 2024
- Plumas NCC | La Inteligencia Artificial para la resolución de conflictos. Una visión al modelo de Minority Report - septiembre 30, 2024
- NCC Radio Ciencia –Emisión 278 – 30/09/2024 al 06/10/2024 –La 3ra Cumbre de Fauna Silvestre UNASAM resalta el cuidado del medio ambiente en México - septiembre 30, 2024