Río de Janeiro, Brasil 

Entre la pandemia de coronavirus y el clima lluvioso, la celebración de Año Nuevo en la famosa playa de Copacabana de Río de Janeiro se vio bastante opacada, pero este sábado surgió un dato a destacar: hubo un 50% menos de basura que recoger.

La compañía municipal de limpieza COMLURB dijo que su servicio recolectó de 320 toneladas de basura tras las celebraciones cariocas de fin de año, menos de la mitad del promedio anual de 724,2 toneladas de 2018 a 2020.

Eso incluye 167 toneladas recogidas en Copacabana tras una exhibición de fuegos artificiales de 16 minutos sobre la playa, respecto al promedio prepandémico de 340,6 toneladas.

«Tendremos las playas y orillas limpias mucho antes de lo acostumbrado», dijo el jefe de COMLURB, Flavio Lopes, mientras cerca de 5.000 recolectores de basura terminaban el trabajo de limpieza a las 9H00 locales.

Tras cancelar sus mundialmente famosas festividades de Año Nuevo el año pasado por el covid-19, Rio retomó una versión de más bajo perfil este año, pidiendo a las personas que celebraran cerca de casa y cancelando los conciertos y el transporte público.

Las celebraciones en Copacabana solo atrajeron a una fracción del récord de tres millones de personas de hace dos años, y el clima lluvioso tampoco fue propicio para una fiesta que ya tenía un ambiente enrarecido por la ómicron, una variante muiy contagiosa del coronavirus.

Brasil ha registrado casi 620.000 muertes desde el inicio de la pandemia y es el segundo país del mundo con más cantidad de fallecidos, apenas por detrás de Estados Unidos.

Por: AFP