Ley Antitabaco en México: un dilema entre la salud y el sector económico

México.

Se puede fumar, pero no frente a un hospital. México comenzó con una reforma a la Ley Antitabaco que prohíbe la publicidad en cualquier medio, la exhibición en lugares de venta y el consumo en varios espacios al aire libre. Se trata de unos de los reglamentos más estrictos del mundo que afecta sobre todo a cerca de 15 millones de fumadores en el país, pero que ha recibido una notable aceptación.

“Como fumador, esto nos está fomentando a tener lugares más limitados y por lo tanto limitar el número de cigarros que uno pueda fumar al día”, “Yo soy fumadora, pero muchos que no fuman sí les molesta bastante y es malo para la salud de todos los que no fuman”, “Si voy caminando por la calle y me encuentro a alguien que está fumando, yo estoy inhalando su humo y me hace daño. Para mí es excelente porque como fumadora pasiva también me expongo”, comentaron algunos mexicanos.

Varias organizaciones empresariales promoverán un aluvión de amparos bajo el argumento que la nueva ley impactará a 85 mil tiendas de abarrotes tan solo en la capital y que en todo el país genera más de 2 millones de empleos directos.

Uno de estos pequeños negocios es el de Magdalena que ya ha quitado las cajas de cigarrillos de su mostrador. “Sí era muy importante la venta de los cigarros, porque eso dejaba el mayor ingreso en el negocio, pero a partir de esta nueva ley nos bajará como el 10 por ciento de ingreso”, comentó Magdalena.

Las medidas buscan frenar el consumo de tabaco en adolescentes que comienzan a fumar a los 14 años, en promedio. Sin embargo, se vulneran los derechos del consumidor adulto y ponen al cigarrillo al nivel de productos ilegales.

El presidente del Consejo Nacional para el Desarrollo del Pequeño Comercio, Gerardo Pleto, advierte de este riesgo. “Este tabaco que entra de contrabando comenzará a ser comercializado y se va a confundir entre el tabaco formal de las empresas que cumplen con la normatividad”, expresó.

El dilema entre salud, finanzas públicas y sector privado que el gobierno mexicano esta vez ha resuelto por opción de salvar vidas. El tabaquismo provoca en México unas 60 mil muertes al año y obliga a desembolsar más del 9 por ciento del presupuesto en salud: un costo humano y económico que se pretende cortar drásticamente.