Prácticas sostenibles, entre las alternativas contra el glifosato en México

México.

Pánfilo prepara su arado con tracción animal para eliminar las malezas de su cultivo de calabazas: una de las alternativas agrotécnicas para sustituir al glifosato.

En Vicente Guerrero, una pequeña comunidad en el centro de México, llevan dos décadas realizando estas labores manuales fabricando su propio abono natural. Así evitaron el uso de agroquímicos, cuando empezaron a sufrir enfermedades respiratorias y vieron el deterioro de sus tierras.

“Sí había un efecto, eran restos de un herbicida que en el momento no nos dábamos cuenta, pero después vimos que tenía un efecto en la salud y en las plantas que eran comestibles porque acababa con ellas y repercutió en la alimentación”, explicó Pánfilo.

En todo el mundo se pusieron más de 100 mil denuncias por sus efectos cancerígenos, por ello, el gobierno mexicano prohibió por decreto el glifosato para 2024, así como la eliminación del uso de transgénicos. Los gremios agroindustriales consideran que las medidas causarán una crisis de competitividad y una gran caída en la producción del maíz, cítricos, tomate, café, chile y frijol.

Este pequeño productor de hortalizas, Emiliano, utiliza glifosato para acabar con la maleza de los bordes de su parcela. “Hasta ahora nadie me ha dicho ‘mira tenemos esta otra alternativa’ si me dijeran una alternativa, la seguimos y podemos evitarla también”, comentó Emiliano.

No hay cifras concretas sobre el uso de glifosato en México, pero a nivel mundial se calcula que un 40 por ciento de la agricultura industrial lo utiliza. Para el investigador, Rodrigo Medellín, la prohibición es un gran paso pero de difícil implementación debido a que por su efectividad hay cultivos que forzosamente necesitan del glifosato y las instituciones no tienen la capacidad.

México busca sustituir el glifosato con químicos de menor toxicidad o productos orgánicos. México es el cuarto productor de alimentos orgánicos, sin embargo su extensión se concentra en tres estados.

La administración del presidente López Obrador, dedicará recursos para desarrollar herbicidas menos tóxicos a la par de iniciar un cambio de modelo productivo como señala el subsecretario de agricultura Víctor Suárez.

La comunidad de Vicente Guerrero, creó un grupo de capacitación y se volvió referente en prácticas sostenibles. Para su coordinador, Pánfilo, la consecución de alternativas sólo será posible con la implicación de las grandes empresas y el apoyo suficiente del gobierno.

Un campo mexicano que avanza con incertidumbre hacia un futuro más saludable.

Por: Deutsche Welle.