Colombia.

Más allá de su valor económico, los billetes, monedas y medallas guardan un profundo significado histórico. Para algunos, son simples objetos de transacción; para otros, verdaderas cápsulas del tiempo que testimonian épocas, culturas y eventos que han marcado el devenir de la humanidad. De esta mirada nace la pasión por la numismática y la notafilia.

Durante un reciente encuentro realizado en Bucaramanga, comerciantes y coleccionistas de diversas regiones de Colombia y otros países se dieron cita para compartir, intercambiar y reflexionar en torno a esta práctica que combina memoria, cultura y patrimonio.

“Hoy están aquí todos los pilares fundamentales de esta disciplina: los comerciantes, que consiguen las piezas desde la base primaria y las hacen llegar a los coleccionistas. A ellos se les debe mucho y es importante apoyarlos”, señaló uno de los participantes.

Para muchos, el coleccionismo comenzó desde la infancia, con monedas sueltas o figuritas de álbumes. Esa afición inicial se convierte, con el tiempo, en una forma de preservar la historia y transmitir conocimiento. “Es algo que se hereda. Despierta la curiosidad y el deseo de enseñar y compartir”, comentó otro expositor.

Los objetos numismáticos han sido testigos silenciosos de grandes transformaciones sociales. Un ejemplo citado fue el caso de Alemania durante la Segunda Guerra Mundial, cuando la hiperinflación provocaba que los precios cambiaran drásticamente en cuestión de horas. “Un huevo podía costar un peso en la mañana y diez por la noche. La gente usaba bonos para poder hacer mercado el mismo día”, se relató durante la jornada.

Más allá del coleccionismo como inversión, quienes se adentran en este mundo descubren historias ocultas detrás de cada pieza. “Trabajé años en el sector financiero y nunca supe la historia detrás de los billetes. Aquí, en este evento, entendí su significado, su origen, su simbolismo”, expresó una asistente.

La numismática y la notafilia no solo conservan objetos, conservan memorias. Son una forma de mantener viva la historia, de enseñar que cada moneda tiene algo que decir y que coleccionar es también una forma de narrar el pasado.

Por: Canal Tro.