Estados Unidos. 

Un eclipse lunar total es un gran espectáculo cósmico. ¿Pero qué sucede exactamente durante este evento astronómico? 

La Tierra, la Luna y el Sol están a líneas de tal forma de que la sombra de la Tierra va a cubrir del todo la Luna”, explicó Francisco Andolz, director de operaciones de la misión LRO (Orbitador de Reconocimiento Lunar). 

Durante un eclipse lunar total, la luz del Sol pasa por el filtro de la atmósfera de la Tierra antes de llegar a la Luna, y esto la tiñe de un color rojizo

“Este color rojizo es porque en ese momento que la Luna está pasando por el centro de la sombra de la Tierra, todos los atardeceres y amaneceres de la Tierra se están reflejando en ese momento en la superficie lunar. Y por eso la Luna, a medida que va pasando por la sombra, se torna rojizo, tan espectacular”, agregó Francisco Andolz. 

La luz viaja en diferentes longitudes de onda. Nuestra atmósfera dispersa la luz azul, pero la luz roja, naranja y amarilla, de mayor longitud de onda, atraviesa la atmósfera terrestre, haciendo que la Luna se vea roja desde la Tierra. Cuanto más polvo o nubes hay en la atmósfera, más roja aparecerá la Luna. 

“Y una de las cosas especiales sobre eso es que aquellas personas a través del mundo que puedan verlo van a estar compartiendo en ese mismo momento esos atardeceres, esos amaneceres en un solo instante”, expresó Francisco Andolz. 

Además de brindarnos un espectáculo natural, un eclipse es una gran oportunidad para la ciencia. La NASA estudia la Luna de muchas maneras. Una de ellas es mediante el Orbitador de Reconocimiento Lunar, o LRO de la NASA, que ha estado observando nuestro satélite de manera ininterrumpida desde 2009. 

“Hemos observado la superficie, hemos visto cómo cambia las temperaturas en la Luna, hemos detectado donde son los depósitos de minerales y los depósitos de agua, y también la radiación”, concluyó el director . 

El equipo del LRO ha aprovechado este tipo de eventos para descubrir más sobre diversos componentes en nuestros satélites, por ejemplo, sobre su suelo. Durante un eclipse, la Luna queda sumida en la sombra de la Tierra, y su temperatura cae drásticamente en cuestión de horas. En eclipses anteriores, el LRO midió cómo la superficie de la Luna responde a los cambios bruscos de temperatura. Las rocas, dependiendo de su tamaño y densidad, se enfrían a diferentes velocidades. Esta información permitió a los científicos un mejor entendimiento de nuestro satélite. 

Un eclipse lunar total puede durar varias horas. A diferencia de un eclipse solar total, los eclipses lunares no requieren ningún tipo de equipo para observarlos, como lentes de protección. Así que, si tienes la oportunidad de presenciar este fenómeno cósmico, no te lo pierdas.