La música tradicional china brilló en el Teatro Colón

Argentina.

La música tradicional de China engalanó el emblemático Teatro Colón de la ciudad argentina de Buenos Aires, recinto que acogió este día un concierto del Cuarteto de Cuerdas de la Ciudad Prohibida de la Orquesta Sinfónica Nacional de China. El embajador de China en Argentina, Wang Wei, invitó a los presentes a disfrutar del evento, que describió como un «viaje» a China a través de su música folclórica, matizada por la presencia de instrumentos occidentales.

A continuación, los integrantes del Cuarteto de Cuerdas ingresaron en la sala, reconocidos a nivel internacional desde su formación en 2010 por su repertorio, que abarca piezas emblemáticas del patrimonio cultural chino así como piezas originadas en Europa. La presentación dio cuenta de la calidez y delicadeza de las interpretaciones, que lograron una alta cohesión, lo que además mostró las exquisitas habilidades y los ricos conocimientos musicales de la agrupación.

“Es importante para reforzar el vínculo, la historia, la tradición y poder construir a  futuro nueva música y nuevas interpretaciones conjuntas aunque es un poco lo que parece que más nos va a interesar y ayudar para vincular la relación entre los dos países”, comentó Guillermo Rehermann, coordinador de relaciones internacionales.

El cierre, que colmó de aplausos el recinto, correspondió a la ejecución del opus 18 de Ludwig van Beethoven, pero previamente los intérpretes sorprendieron con Libertango, del bandoneonista y director de orquesta Astor Piazzolla.

Por su parte, Guillermo Rehermann, coordinador de Relaciones Internacionales del Departamento de Artes Musicales y Sonoras de la Universidad Nacional de las Artes, destacó ante esta agencia la actuación del cuarteto chino. “Quedé profundamente asombrado de cómo pueden arreglar esa música tradicional china en un contexto occidental como es el cuarteto de cuerdas”, Jorge Lhez, director artistico.

El Teatro Colón que acogió el evento fue inaugurado el 25 de mayo de 1908 con la ópera Aída, de Verdi, y por él han pasado directores como Richard Strauss e Igor Stravinsky, cantantes líricos como Enrico Caruso, María Callas y Luciano Pavarotti, el pianista chino Lang Lang y bailarines de renombre mundial como Anna Pavlova, Rudolf Nureyev y Maia Plissetskaya.