Tokio, Japón.

El espacio Tokyo Node, compuesto por una galería de arte digital y un laboratorio de creación, abrió este lunes sus puertas en Tokio con una exposición que combina danza, proyecciones visuales e Inteligencia Artificial (IA).

Bajo el nombre «Syn: Un nuevo horizonte de sensaciones físicas», esta actuación inmersiva busca «cambiar los sentidos humanos» adentrando a sus visitantes en un espacio similar a una nave espacial, donde queda rodeado por pantallas, bailarines y un sonido envolvente.

«La exposición reconstruye nuestras sensaciones inherentes y explora el mundo real desde una nueva perspectiva. Aunque el escenario es un lugar donde se reúnen los artistas y el público, también es un espacio creativo donde las interpretaciones de cada individuo se entrelazan constantemente», explicaron los organizadores en un comunicado.

Tras una primera sala que hace de entrada a la nave, el visitante realiza un recorrido por otros espacios inmersivos que también combinan danza, pantallas y proyecciones en 3D, en un área de más de 1.500 metros cuadrados.

Esta supone la exposición inaugural de Tokyo Node, un espacio que incorpora arte con un centro de convenciones, un laboratorio y restaurantes y que está situado entre las plantas 45 y 49 de la torre de nueva construcción Toranomon Hills Station, en el corazón de la capital japonesa.

Además de la galería, situada en la planta 45, en la planta número 8, también cuentan con un laboratorio para que empresas y artistas puedan realizar proyectos de artes digitales, como experiencias de realidad aumentada (RA) y de video volumétrico, una técnica que captura el espacio de forma tridimensional.

Tokyo Node Lab permite la captura, edición y distribución de imágenes 3D y está pensado, según sus responsables, para que «creadores y empresas innovadoras de todas las industrias y campos se unan para promover una variedad de proyectos conjuntos que crean nuevas experiencias y contenidos urbanos».

La actual exposición podrá verse desde el día 6 de octubre hasta el 12 de noviembre, y dará paso después a otra exposición inmersiva a cargo de la fotógrafa y directora de cine japonesa Mika Ninagawa, que abrirá el 5 de diciembre y que se espera que tenga flores como elemento principal.