Perú

 

El uso de la tecnología, con pequeños robots todo terreno, ha permitido descubrir posibles sacrificios humanos de hasta tres mil años de antigüedad en el templo de Chavín de Huántar, en Perú, el primer gran centro religioso y de peregrinación en la historia de Sudamérica.

Estos vehículos de tracción en las cuatro ruedas dirigidos por control remoto, y equipados con cámaras y sistemas de iluminación, llevaron a descubrir por primera vez entierros de la propia época Chavín: milenarias escenas funerarias intactas de los mismos hombres que construyeron el templo, algo de lo que no existía registro.

El arqueólogo estadounidense John Rick, director desde hace casi 25 años de las excavaciones que financian el Ministerio de Cultura de Perú, la Universidad de Stanford (Estados Unidos) en conjunto con la minera Antamina, afirma que puede encontrar al menos otros tres entierros, pues tiene ubicadas sendas galerías similares a estas, situadas entre el costado izquierdo del templo mayor y la plaza redonda del complejo, declarado Patrimonio Cultural de la Humanidad en 1985 por UNESCO.

Hasta ahora hay identificados 36 túneles o pasadizos que van bajo tierra y se comunican entre sí,pero el mapa de este laberinto está incompleto y para el director de las excavaciones todavía hay siglos de trabajo en estas ruinas donde aproximadamente cada 300 años se construían nuevos pasadizos, unos sobre otros.

Estos hallazgos y los próximos que vendrán, son considerados solo las capas superficiales de este monumental rompecabezas. Serán expuestos en el Museo Nacional Chavín, a escasos metros de las ruinas, donde recientemente fue inaugurado su Centro Internacional de Investigación, Restauración y Conservación.

Por: EFE