Ecuador.

Las paradisíacas islas Galápagos en Ecuador, una de las reservas marinas mejor conservadas del mundo, no se han escapado de la epidemia de gripe aviar, que ha afectado a varias especies del archipiélago, en el que un grupo de investigadores busca determinar si el fenómeno climático del niño ayudó a las medidas tomadas por las autoridades para frenar su propagación.

Las estrictas normas de bioseguridad monitoreó constante y cierre algunas islas al turismo permitieron a las autoridades frenar la expansión de la enfermedad en el archipiélago, una zona de altísima biodiversidad, mucha de ella endémica.

El director del Parque Nacional Galápagos contó sobre esto. “La transportación del virus puede darse de manera física, los piqueros patas rojas siguen a las embarcaciones, defecan sobre los barcos, los pasajeros pueden pisar y transportar a otras islas, por eso se clausuró la isla de Genovesa, la parte norte de San Cristóbal Punta Pitt, la isla Lobos que también fue afectada y para evitar también daños en otras islas que tienen poblaciones endémicas y frágiles como la isla de Española, se suspendió la visita a Punta Suárez, se abrieron un poco las posibilidades de visitas en zonas de playa lejanas a colonias, teniendo todos los informes técnicos para evitar un traslado de este virus y también manejar el turismo de la mejor manera”, explicó Arturo Izurieta sobre el control de la enfermedad en el archipiélago declarado desde 1978 por la UNESCO como Patrimonio Natural de la Humanidad.

Gustavo Jiménez Suscátegui, investigador principal del proyecto de aves marinas, indicó que tras varios correos y la toma de cientos de muestras, han identificado cuatro especies de aves afectadas, el piquero de patas rojas, el de patas azules, el nazca y fragatas.

¿Cómo llegó a las Islas? Es de una forma directa debido a un animal, uno o dos individuos, bueno, individuos afectados que vinieron posiblemente de las zonas de alimentación hacia Galápagos. ¿Por qué? Esta enfermedad es prácticamente fulminante, en 48 horas este animal muere”, subrayó Jiménez Suscátegui.

Por ello especuló que posiblemente el fenómeno de El Niño fue positivo solo para que esta enfermedad no sea tan virulenta, tan activa, como hubiera sido una época fría normal, algo que se comprobará con monitoreos cuando pase la época cálida y el fenómeno de El Niño que puede durar hasta mediados del 2024.

“Si vemos algo normal el fenómeno de El Niño y el de La Niña han sido, tanto positivo como negativo para Galápagos, durante miles y miles de años para las especies y los hábitats y estas especies han evolucionado con esto y están bien”, relató Jiménez Suscátegui.

El director del parque avanzó que si el último monitoreo que hay en la isla Lobo vuelve a arrojar un diandose con negativo, podrían abrirla la primera semana de abril y luego Punta Pitt, pero todo sigue en estudio.