México.

Las estudiantes mexicanas Alondra Monserrat López López e Itzel Paniagua Castro crearon un popote 100 por ciento biodegradable a partir de cáscara de mango y baba de nopal.

Asesoradas por Cecilia Espinosa Muñoz, profesora de Química del Colegio de Ciencias y Humanidades (CCH, oriente), de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM), las jóvenes lograron desarrollar una alternativa ecológica para hacer frente a la lucha contra de los plásticos.

«Escogimos crear un bioplástico amigable con el medio ambiente debido a que el planeta está atravesando por una crisis en la que, si no retornamos acerca de los que hacemos, destruiremos el planeta muy pronto», dijo López López. Asimismo, la estudiante recordó que durante un año se realizó investigación teórica y práctica, pasando por distintos materiales como la cáscara de naranja y la de plátano; sin embargo, éstas últimas no tenían la suficiente resistencia.

«Cuando intentamos con la cáscara de mango, nos dimos cuenta de que tiene de hasta un 75 por ciento de celulosa que es un biopolímero; además, contiene polifenoles que son moléculas orgánicas que no permiten el desarrollo de bacterias», explicó. El popote tarda en degradarse de cuatro a seis meses en agua o tierra, es totalmente amigable para el medio ambiente y su precio es menor que uno de plástico.

«Estamos frente una nueva alternativa sustentable para reemplazar el plástico, ya que además de popotes, es material con el que está hecho puede utilizarse para crear diversos artículos como platos, vasos, recipientes, etcétera», agregó López López. El desarrollo de este bioplástico obtuvo el primer lugar en el XXVII Concurso Universitario Feria de las Ciencias, Tecnología e Innovación, en la modalidad de «Diseño Innovador», de la máxima casa de estudios de México.

Por: XINHUA