Desde finales de agosto hasta el 30 de octubre, un equipo del Servicio de Inspección Sanitaria de Animales y Plantas del departamento de Agricultura de EE UU (USDA) realizó un control de la vida silvestre, especialmente en pequeños carnívoros, en los alrededores de las granjas peleteras de visiones infectados por SARS-CoV-2 en los Estados de Utah, Michigan y Wisconsin.
Estas inspecciones, que se realizaron como parte de las investigaciones de One Health (una salud, en inglés) y que contaron con la colaboración de los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades, el Servicio Geológico de EE UU y los departamentos estatales de Agricultura, Recursos Naturales y Salud; han permitido identificar el primer ejemplar silvestre de visón americano (Neovison vison), un mustélido nativo de América del Norte, infectado por covid-19.
“La secuencia del genoma viral obtenida de la muestra de visón salvaje era indistinguible de las obtenidas del visón de granja”, dicen Thomas DeLiberto y Susan Shriner, investigadores en el USDA, en un comunicado, en el que se descarta de que se trate de un animal fugado y adaptado al medio.
Al animal, que se encontrada en libertad en el Estado de Utah, se le realizó una RT-PCR en tiempo real y se secuenció la muestra de un hisopo nasal. Dados los resultados positivos, el organismo estadounidense notificó esta detección de coronavirus en un visón salvaje a la Organización Mundial de Sanidad Animal (OIE) como parte del estudio epidemiológico realizado en esas áreas.
Sin embargo, a pesar de la presencia del virus en la fauna salvaje, los científicos indican que “no hay evidencia de que el SARS-CoV-2 esté circulando o se haya establecido en las poblaciones silvestres que rodean las granjas infectadas”. Todos los demás animales de otras especies a los que se tomaron muestras dieron negativo.
Alta sensibilidad de los mustélidos domésticos
La alta sensibilidad de los visones ya se había demostrado con las infecciones en las granjas peleteras de Dinamarca, Países Bajos, EE UU e incluso España. Además, en un estudio, publicado recientemente en la revista PLoS Computational Biology, un grupo de científicos liderado por el Centro de Regulación Genómica (CRG), demostró que después de los humanos, los mustélidos como los hurones, así como gatos, civetas y perros son los animales más susceptibles a la infección por el virus.
El trabajo, que analizó un total de diez especies diferentes, detalla que patos, ratas, ratones, cerdos y pollos tienen por el contrario una susceptibilidad menor o nula a la enfermedad en comparación con los humanos.
“Saber qué animales son susceptibles al SARS-CoV-2 nos ayuda a prevenir la creación de reservas de animales a partir de las cuales el coronavirus puede volver a emerger con el paso del tiempo”, dice Luis Serrano, profesor de investigación ICREA, director del CRG y autor principal del estudio.
Además, “los hallazgos ofrecen una pista de por qué la enfermedad infecta a los visones, que están estrechamente relacionados con el hurón. Esta situación se acentúa por sus condiciones de vida en espacios abarrotados y el contacto cercano con trabajadores humanos”, recalca el investigador.
Por: SINC
- Plumas NCC | Biodiversidad y cambio climático: ¿Cumbres de plata solamente? - noviembre 26, 2024
- Plumas NCC | Código de Buenas Prácticas de IA - noviembre 26, 2024
- Líder indígena, Huni Kuin, ONU,biopiratería, Australia, edad mínima, redes sociales - noviembre 25, 2024