Moscú.-

El cosmonauta ruso Oleg Kononenko, que llegó a la Estación Espacial Internacional (EEI) el pasado día 3 en la nave tripulada Soyuz MS-11, ha iniciado un experimento en la plataforma orbital para imprimir tejidos humanos con ayuda de una bioimpresora 3D, informó hoy la agencia espacial rusa Roscosmos. 

«Ya se han obtenido los primeros resultados experimentales: se ha creado una estructura orgánica de la glándula tiroides de un ratón en condiciones de cero gravedad», indicó en un comunicado Roscosmos.

El tejido y las muestras viajarán para su análisis a la Tierra el próximo 20 de diciembre, cuando los miembros de la EEI Alexander Gerst, Serena Auñón-Chancellor y Serguéi Prokópiev aterricen en la estepa de Kazajistán.

Los resultados del ensayo, efectuados con la bioimpresora magnética «Organaut», diseñada para realizar el primer experimento del mundo para imprimir tejidos humanos en órbita, se harán públicos a principios de 2019, indicó Roscosmos.

El proyecto “Bioprinter magnética 3-D”, está siendo llevado a cabo desde 2016 por “3D Bioprinting Solutions”, un laboratorio de investigación biotécnica, Roscosmos e «Invitro».

Una bioimpresora similar estaba a bordo del Soyuz MS-10, la nave que sufrió un incidente en su lanzamiento el 11 de octubre y que se vio obligada a ejecutar un aterrizaje de emergencia.

El aparato quedó destruido y tuvo que ser reemplazado por uno nuevo, que es el que ahora se encuentra en la EEI.

Por: EFE