La contaminación atmosférica en Lahore, la segunda ciudad de Pakistán, aumentó a niveles alarmantes. Hace días que la ciudad de 14 millones de habitantes está envuelta en una neblina de smog, pues el nivel de contaminación por partículas finas en el aire, superó en 40 veces el nivel máximo considerado como aceptable por la Organización Mundial de la Salud (OMS).

Este smog puede provocar en caso de exposición prolongada accidentes cerebrovasculares, cardiopatías, cáncer de pulmón y enfermedades respiratorias, sobre todo en los niños. En ese marco, las autoridades decidieron cerrar las escuelas primarias durante una semana. “Sentimos el pecho oprimido y nos cuesta respirar, cuando montamos en bicicleta sentimos que los ojos nos arden. Si esto sigue así le quitará años de vida a la gente de Lahore”, dijo el poeta Shahzad.

Además del cierre de escuelas, la mitad de los empleados de los sectores público y privado deberán trabajar desde casa. También se prohibió a las escuelas organizar actividades deportivas al aire libre hasta finales de enero.