Colombia.
Con el objetivo de generar un suplemento alimenticio para las abejas en épocas críticas y evitar su desaparición, Carina Villegas, su zootecnista de la UNAD, creó una torta que le permite a la abeja, el organismo considerado como el más importante del mundo, alimentarse en época de escasez o de poca floración.
El proyecto se gestó en el marco de su trabajo de grado y se desarrolló en la finca agroecológica El Oasis, ubicada en Santander de Quilichao, al norte del Departamento del Cauca, terreno que se configura como un espacio de práctica para estudiantes del programa de zootecnia de la UNAD y en donde se adelanta un programa de protección de abejas.
“Este es un programa de conservación de abejas que tenemos aquí en la finca agroecológica El Oasis, nosotros generalmente lo que hacemos son rescates de ellas, las rescatamos en Santander de Quilichao en la parte urbana y las reubicamos aquí en la finca, tenemos todos estos problemas de cambio climático, están afectando las floraciones, se están presentando floraciones discontinuas, se presentan heladas, haciendo que las flores duren menos tiempo en los árboles y eso afecta la producción de néctar y, por ende, la producción de alimento. Y ahí es donde nace el trabajo de la estudiante Karina de la Universidad Nacional, a la abierta ya distancia, donde evaluó unas tortas proteicas para hacer esa suplementación en las abejas”, explicó el docente, Pedro Castro.
La torta proteica está elaborada con harina de zapallo, una planta que cuenta con importantes nutrientes al aportar vitaminas, proteínas y minerales. A esto se suma que se trata de una hortaliza que prolifera en ese territorio y que una cantidad importante de su producción al no distribuirse en el mercado puede ser aprovechada en alimentación animal.
Se estima que un kilo de torta proteica es suficiente para alimentar una colmena durante cuatro semanas. Su costo está alrededor de un dólar y los resultados dejan ver que en su implementación es posible aumentar la población de abejas en un 30%.
El proyecto ladista también evidenció que al alimentar a las abejas con esta torta no se contamina la miel. Además, es un producto de fácil almacenamiento, fácil de suministrar a los animales, no produce hongos y su elaboración conlleva un procedimiento sencillo.
En la actualidad se trabaja con asociaciones de apicultores a quienes se les enseña el proceso de fabricación de la torta con el fin de que sea incorporada a sus apiarios.
Por: UNAD.
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