Cali, Colombia.

 

 

El 38% de los árboles del mundo están amenazados de extinción, según la primera «Evaluación Mundial de los Árboles» publicada este lunes por la Unión Internacional para la Conservación de la Naturaleza (UICN) en el marco de la COP16 que se celebra en Colombia.

Por primera vez, la mayoría de los árboles del planeta han sido incluidos en la lista roja de la UICN, con al menos 16.425 especies en riesgo de extinción de las 47.282 identificadas.

La lista roja de la UICN, inventario mundial del estado de conservación de las especies vegetales y animales, fue actualizada el lunes con cifras alarmantes: del total de 166.061 especies evaluadas, 46.337 están amenazadas de extinción y 10.235 en peligro crítico. Más de 900 ya desaparecieron.

Colombia, uno de los países más biodiversos del mundo, acoge hasta el 1 de noviembre la COP16, donde 196 Estados debaten para llegar a acuerdos que permitan detener la destrucción de la naturaleza.

Alrededor de 23.000 delegados, entre ellos un centenar de ministros y una decena de jefes de Estado, se reúnen en Cali (suroeste) bajo el lema de «Paz con la naturaleza» que identifica a esta edición de la cumbre de Naciones Unidas.

 

Antecedentes

 

Los árboles representan actualmente más de una cuarta parte del inventario de la UICN, y el número de estas especies amenazadas es más del doble que el de todas las aves, mamíferos, reptiles y anfibios en riesgo juntos.

«Los árboles son esenciales para mantener la vida en la Tierra debido a su papel vital en los ecosistemas, y millones de personas dependen de ellos», subrayó en el informe Grethel Aguilar, directora general de la UICN.

Este primer panorama global del estado de conservación de los árboles es el resultado de la movilización de una red mundial de más de 100 socios institucionales y más de 1.000 expertos.

Las especies de árboles amenazadas de extinción están catalogadas en 192 países.

«Esperamos que esta aterradora estadística de uno de cada tres árboles en peligro de extinción incentive una acción urgente y se utilice para guiar los planes de conservación», apuntó en el informe Eimear Nic Lughadha, investigadora principal de evaluación y análisis de la conservación en los Reales Jardines Botánicos Kew, en Inglaterra.