Hermosillo, México.

 

El Centro para la Biodiversidad Biológica, una organización ambiental binacional, pidió este martes a Estados Unidos que implemente sanciones comerciales contra México por permitir la pesca ilegal de tortugas marinas en el golfo de Ullola, en el estado de Baja California Sur.

El biólogo Alejandro Olivera, representante mexicano de la organización, declaró a EFE que el Servicio Nacional de Pesca Marina de Estados Unidos (NMFS, en inglés) certificó en agosto pasado a México bajo la Ley de Protección de Moratoria estadounidense, por lo que Washington podría prohibir la importación de mariscos mexicanos.

“Las tortugas caguama están en peligro de extinción y necesitan la protección conjunta de ambos países para sobrevivir. Es crucial que el presidente Joe Biden prohíba las importaciones de pescados y mariscos de México y presione para que se apliquen medidas de protección”, comentó.

La organización, cuya principal sede en EU.UU. está en Arizona y en México está en Baja California Sur, aseguró que las redes utilizadas en las pesquerías de lenguado y tiburón en la península de Baja California, en el noroeste de México, capturan miles de tortugas caguama pertenecientes a la población del Pacífico Norte.

Estos animales migran desde las zonas de anidación en Japón hasta las áreas de alimentación en México y Estados Unidos, para luego retornar a las costas asiáticas para su reproducción.

De acuerdo con la Ley de Protección de Moratoria de EE.UU., el Servicio Nacional de Pesca Marina tiene la obligación de identificar a las naciones que realizan capturas incidentales de vida silvestre protegida, cuando dicha nación no cuenta con reglas de protección de especies “comparables” a las de Estados Unidos.

Dos años después de esta identificación y tras conversaciones con la nación en cuestión, el Servicio certifica a la nación si no ha adoptado regulaciones comparables.

En caso de que la nación obtenga la certificación, la Ley exige que Estados Unidos prohíba las importaciones de pescados y mariscos del país en cuestión.

El Servicio de Pesca identificó a México por primera vez en 2013 por su captura incidental de tortugas marinas y emitió una certificación negativa en 2015 por pesca ilegal pero el entonces presidente Barack Obama aplazó la emisión de sanciones porque el Gobierno mexicano adoptó nuevas regulaciones.

Sin embargo, la Procuraduría Federal de Protección al Ambiente (Profepa) de México pronto comenzó a documentar altos niveles de varamientos a medida que la aplicación de la ley se relajaba.

Tan solo en 2021, se encontraron 682 tortugas caguama muertas en playas locales, y los científicos estiman que solo el 20 % de las tortugas capturadas en artes de pesca llegan a la costa, lo que sugiere que probablemente miles murieron ese año, según expuso el Centro para la Biodiversidad Biológica.