Líbano.

George no sabe que nació bajo las más extrañas circunstancias: una inminente pandemia, colapsos sin precedentes de la economía y la mayor explosión no nuclear, en la historia.

Su padre recuerda el día que nació y que él inmortalizó en video. “Seguí filmando, no sé por qué. De repente la llevaron a la sala de partos y ahí fue cuando se produjo la explosión. Estábamos en el parto y tras una hora y 10 minutos, nació George”, comentó.

De inmediato el video se hizo viral y George se volvió un símbolo de esperanza para un país paralizado por un desastre inimaginable. Pero todo parece haber ocurrido hace mucho tiempo para este hogar que vive feliz en las afueras de Beirut. “Ese día fuimos felices, fuimos los pocos en Líbano que tuvieron una alegría. Cuando fuimos éramos 7 y volvimos siendo 8”.

Edmond y Emmanuel son conscientes de los problemas que azotan a su país y si fuera poco, la incertidumbre del rumbo que tomará la nación, ha hecho la vida más difícil. Pero estos padres han decidido ser positivos pese a todo por su hijo. “Desde que nació, George ha sido nuestra única esperanza tras la explosión. Tenemos que cuidarlo, él no tiene la culpa de estos malos momentos que estamos atravesando”, concluyó su padre.

Ahora la esperanza es lo único que le queda a esta familia que mira cómo en Líbano, se enfrenta a un futuro incierto.

Por: Deutsche Welle.