Pakistá.

Behnam Waqas es uno de los tantos pakistaníes que instalan paneles solares en los techos. “Las tarifas van a seguir aumentando, no van a bajar, por eso me decidí por los paneles solares”, dijo el dueño. Los paneles solares también le ayudan a garantizar su suministro eléctrico. La red eléctrica en Pakistán no es muy estable.

Hay cortes de electricidad muy a menudo y por eso recurrí a fuentes de energía alternativas, un sistema de suministro ininterrumpido o un generador. Pero cuando las temperaturas en Karachi superan los 40 grados tengo que cambiar de una fuente de energía a otra. Con la energía solar, en cambio sé que una vez instalada me servirá por 15 años”, comentó.

Algunas empresas e industrias pakistaníes también se decidieron por la energía solar. “Bombas de agua, agricultura, industrias, casas privadas, donde quiera que vayas verás energía solar. Todos los que tengan un tejado y luz solar optan por la energía solar”, destacó el dueño.

El gobierno también fomenta el traspaso a la energía solar. “Hemos comunicado nuestro apoyo a las grandes empresas locales. Deberían fabricar aquí los paneles y montar una industria solar aquí. No necesitamos importar. Los ayudaremos a conseguir terreno con los impuestos y en todo lo que podamos”, relató.

Sólo el 5% de la electricidad generada en Pakistán procede de energías renovables. Los combustibles fósiles siguen constituyendo el 63% del suministro, pero no son solo los beneficios a corto plazo como el costo y la fiabilidad los que impulsan esta transformación.

Pakistán es uno de los países más afectados por el calentamiento global. Con este cambio gradual a las renovables, Pakistán espera contribuir a reducir las emisiones de gases de efecto invernadero.