México.

A la fecha, el órgano más requerido para trasplante es el riñón. El 10 por ciento de la lista de espera en México, es de Guanajuato, es decir, cerca de 1,600 personas esperan por uno. Iyari, una niña de 11 años de edad tuvo la dicha de recibir por donación de un cadáver, un nuevo riñón; sin embargo, la espera no fue fácil.

A los 5 años, la pequeña Iyari fue diagnosticada con síndrome nefrótico, una enfermedad del riñón que ocasiona que el cuerpo elimine demasiadas proteínas en la orina. Con el paso del tiempo, su condición se deterioró. En 2019, comenzó con hemodiálisis por insuficiencia renal. En el Hospital de Especialidades Pediátrico de León, tuvo la oportunidad de entrar a la lista de espera por un riñón por dos opciones: con cadáver o donador vivo.

“Yo le dije que quería donarle, pero me resultó un problema con la vesícula y ya no le pude donar. De igual manera, el doctor dijo que mientras yo me atendía, podría seguir con el otro en la lista de espera”, explicó María de Jesús, madre de Iyari. Fue un año y cuatro meses la larga odisea que pasó la familia, para que Iyari fuera trasplantada.

“Al momento que te dicen que tu hija tiene insuficiencia renal, se te cae el mundo. Porque dices ‘no, ya se va  morir’, es lo primero que piensa uno. Pero ya con el proceso de hemodiálisis o diálisis, que te dicen que es algo alternativo, para que ellos estén bien mientras esperan el trasplante, pues sí es algo difícil porque no entienden la enfermedad. Incluso, a veces quieres tirar la toalla, dices ‘ya no quiero seguir’”, agregó la madre de Iyari.

María de Jesús, pidió a los padres que pasan por una situación similar, que tengan paciencia. Iyari, es una niña feliz que poco a poco retoma su vida cotidiana, su salud ha mejorado significativamente gracias al trasplante.

Por: Canal 4 Guanajuato.