México.

Una de las alternativas diseñadas para el tratamiento de la adicción a la nicotina fue el cigarro electrónico, pero cuidado, esta opción también parece ser igual de dañina para la salud.

El vapeo consiste en la inhalación de aerosoles dulces producidos por los cigarros electrónicos y una solución líquida. La mayoría pensamos que al usarlo se produce vapor de agua, pero en realidad se producen aerosoles que pueden tener propilenglicol, glicerina o partículas de metales que pueden dañar nuestros órganos vitales.

Probablemente, este hábito es popular entre tus amigos y conocidos. Desafortunadamente, aún no está siendo regulado. Por esto ponte atento con lo que se pone de moda. Tu yo del futuro te lo agradecerá.

Por: TV UNAM.