Francia.

El coral, un animal de la misma familia que las medusas, alberga en sus pólipos microalgas llamadas zooxantelas. El coral y las microalgas tienen una relación simbiótica.

Las microalgas proporcionan al coral su color y hasta el 90% de su energía, compuesta por oxígeno y moléculas orgánicas mediante el proceso de fotosíntesis. Así el coral puede producir la piedra caliza necesaria para construir su esqueleto. A cambio, el coral proporciona a las algas o hábitat y el dióxido de carbono necesario para la fotosíntesis.

Cuando están sometidos a estrés por las altas temperaturas del agua, la acidificación de los océanos o la contaminación, los corales expulsan a las microalgas de las que dependen para sobrevivir, se vuelven blancos y pueden morir.

Una vez que desaparece la fuente del estrés, los corales pueden recuperar sus zooxantelas, pero esto depende de la duración y la gravedad de la perturbación ambiental.