Europa.

Científicos siembran las nubes para provocar nevadas. Esperan a que lleguen para introducirles partículas activadoras. Es un reflejo de la necesidad de encontrar agua de cualquier manera posible.

“Podemos insertar yoduro de plata desde un avión que vuela entre las nubes o desde una base en tierra que suelta humo y sube hasta ellas encima de las montañas. Cuando el yoduro de plata alcanza las nubes, forma hielo”, Sarah Tessendorf, científica.

Estás técnicas se perfeccionan desde hace décadas en todo el mundo. Sin embargo, resulta imposible crear precipitaciones si el tiempo nos acompaña.

“No es la panacea. No puedes sembrar las nubes si no vienen las tormentas de invierno. Así que, si todo está muy seco, no vas a sacar agua de tormentas que no existen”, Scott Griebling, ingeniero.

A favor: el proceso es relativamente barato. En contra: las nubes no siempre reaccionan como se espera.

Por: RTVE.