Los Ángeles (EE.UU.), 19 jul.-

La tecnología de la nube, una de las principales apuestas de presente y futuro para Microsoft, impulsó el resultado de la compañía en su ejercicio fiscal de 2018, en el que sus ingresos crecieron un 14 % y se situaron en 110.360 millones de dólares.

La firma con sede en Redmond (Washington, EE.UU.) se anotó en los últimos doce meses un beneficio neto de 16.571 millones de dólares, un dato que es un 35 % menor al del año anterior, en el que consiguió 25.489 millones, pero que se debe, principalmente, al impacto en sus cuentas de las provisiones extraordinarias relacionadas con la reforma fiscal de EE.UU.

Así, Microsoft destinó en 2018 a este apartado de provisiones 19.903 millones de dólares, mientras que en el ejercicio anterior había reservado 4.412 millones para este fin.

El beneficio operativo de la compañía, un apartado que, como los ingresos, no se ve afectado por las provisiones fiscales extraordinarias, también reflejó la buena marcha de Microsoft, que en este segmento registró 36.744 millones de dólares de ganancias frente a los 29.901 millones del año anterior.

Los resultados de Microsoft superaron las previsiones de los analistas, puesto que los accionistas de la compañía se anotaron en el último trimestre 1,14 dólares por título frente a los 1,08 dólares que preveían los expertos de Wall Street.

De la misma forma, los ingresos de abril a junio de Microsoft, correspondientes al cuarto trimestre de su ejercicio fiscal, ascendieron a 30.085 millones de dólares, una cantidad superior a los 29.200 millones que anticipaban las estimaciones de los analistas.

«Tuvimos un año increíble sobrepasando los 100.000 millones de ingresos como resultado del enfoque incesante de nuestros equipos en el éxito del cliente y la confianza que están poniendo los clientes en Microsoft», destacó en un comunicado de prensa el consejero delegado del gigante tecnológico, Satya Nadella.

En este sentido, el máximo responsable de Microsoft subrayó que las inversiones en tecnología de la nube están dando resultados a la compañía.

Así, los ingresos en el último trimestre correspondientes a la nube inteligente aumentaron un 23 % hasta situarse en 9.600 millones de dólares.

En este apartado sobresalió el notable comportamiento de su plataforma en la nube Azure, que creció un 89 % (Microsoft no ofrece cifras concretas de los ingresos logrados a través de este servicio).

En este lucrativo sector digital, Microsoft trata de competir con Amazon, líder de la tecnología en la nube a través de Amazon Web Services.

Por otro lado, en el campo de los procesos de negocio y productividad de Microsoft, cuyos ingresos aumentaron un 13 % en el último trimestre, destacó la facturación de Office 365 Commercial (un 38 % más) y de LinkedIn (un 37 % más).

Asimismo, los ingresos de la casilla denominada por Microsoft «más computación personal» ascendieron un 17% gracias a los buenos resultados de los ordenadores portátiles Surface (un 25 % más) y del negocio de videojuegos de Xbox (un 36 % más).

En la última edición de la feria E3 de videojuegos, la convención más importante del sector del ocio electrónico,

Microsoft anunció que está trabajando en las consolas que vendrán después de Xbox One X, que fue presentada el año pasado, así como en una nueva plataforma de «streaming» (en línea) para comercializar juegos en todas las pantallas.

Microsoft también dio a conocer en junio que había adquirido la compañía de desarrollo de software GitHub en una operación valorada en unos 7.500 millones de dólares.

Los resultados de Microsoft fueron publicados hoy tras el cierre del mercado de Wall Street y las acciones de la compañía subieron un 0,9 % en las transacciones electrónicas posteriores. Por: David Villafranca