España.
España contabiliza 193.247 hectáreas forestales calcinadas en lo que va de año, lo que sitúa al país a la cabeza de Europa en cuanto al impacto de los incendios, pese a que en las últimas horas la mejora de las condiciones meteorológicas, con algo menos de temperatura y más humedad, dio un respiro a algunas de las regiones afectadas por el fuego.
Así se desprende de datos del Sistema Europeo de Información sobre Incendios Forestales (EFFIS) recabados por Efe, que coloca a España en un trágico puesto destacado de una lista en la que el siguiente país más afectado hasta la fecha es Rumanía (149.264 hectáreas), seguido de Portugal (46.593), Francia (39.904 hectáreas), Croacia (30.889 hectáreas) e Italia (25.103 hectáreas).
El cambio climático mata
Una situación de la que alertó el presidente del Gobierno de España, Pedro Sánchez, quien hoy visitó una de las zonas más afectadas en la región de Aragón (norte-este del país), donde recordó el reto que supone la crisis climática y la devastación causada por los incendios, al tiempo que consideró una «cuestión de Estado» las políticas medioambientales.
«El cambio climático mata», dijo Sánchez en reiteradas ocasiones, afirmación respaldada por el exvicepresidente estadounidense Al Gore que en un tuit en el que citaba al presidente español se preguntaba: «¿Cuántos récords más se romperán y cuántas comunidades se verán envueltas en llamas antes de que tomemos las medidas necesarias para evitar los peores impactos de la crisis climática?».
Sánchez lamentó hoy la «pérdida de ecosistemas y de la rica biodiversidad que se expande» por todo el país, consciente del avance por distintos puntos de la geografía española de un fuego favorecido por el calor extremo y las fuertes rachas de viento vividas en los últimos días.
En Aragón, los bomberos tratan de contener el incendio «grave y preocupante» en el municipio de Ateca, según lo calificó el Gobierno regional, que desde el lunes afecta a 14.000 hectáreas de la comarca de Calatayud y que obligó a desplazar temporalmente a 1.700 personas de cinco localidades.
El viento da un respiro
Mientras, el viento en calma dio un respiro en Galicia (noroeste de España), donde la mayoría de las personas desalojadas por el incendio de la localidad de Folgoso do Courel pudo volver a sus hogares.
Cierto alivio vivieron también en el municipio de Losacio (Castilla y León, centro-norte de España) este miércoles por la tregua que dio el fuego: los más de 2.000 vecinos que tuvieron que ser evacuados regresaron a sus hogares al encontrarse el incendio ya sin llama, después de haber arrasado más de 20.000 hectáreas en la región.
A pesar del alivio que vivió ese municipio, el Gobierno regional está muy pendiente de otro incendio, en la localidad de Cebreros, que continua su trayectoria hacia la Comunidad de Madrid.
También próximo a Madrid se desarrolla el incendio declarado en Valdepeñas de la Sierra, Guadalajara (centro del país), que afecta ya a unas 3.000 hectáreas, continúa activo y ha provocado el desalojo de un centenar de vecinos de la zona.
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