Colombia.

Colombia se embarcó en uno de los retos científicos más grandes de su historia, la investigación del Galeón español San José, hundido por corsarios ingleses, frente a las costas de Cartagena de Indias en el siglo XVIII y hallado en 2015, a más de 600 metros de profundidad. Para este trabajo se articularon diferentes instituciones como el Ministerio de Culturas, la Armada y el Instituto Colombiano de Antropología e Historia, ICA.

“Pero asociada a la arqueología y a la cultura y al patrimonio, es la primera vez que nosotros hacemos un esfuerzo tan grande y en este gobierno particularmente creer en las instituciones y en la capacidad que tenemos de hacer algo para mostrarle al mundo, es un reto especial”, habló el jefe de intereses marítimos y fluviales de la Armada de Colombia, el control migrante Hernán León.

Para la investigación que será de seis fases el gobierno colombiano también tomó ya una decisión que facilitará su trabajo y es declarar como área arqueológica protegida de la nación la zona donde está el Galeón, cuyas coordenadas se mantienen en secreto para evitar que lleguen allí casas a tesoros que puedan robarse lo que había en el San José.

“Y que deben estar tranquilos de que esto es un proyecto científico para traer lo mejor de ese conocimiento a los colombianos”, destacó León.

España, parada en las normas de la Unesco, reclama la titularidad del Galeón mientras que el gobierno colombiano declaró al San José bien de interés cultural sumergido y no descarta la colaboración de ese país para tratar el pecio como patrimonio compartido. La directora del ICAN, Alena Caicedo, explicó que la investigación del Galeón es el resultado de una intención de transformación, de lo que implica la historia de Colombia.

“Queremos garantizar a través de esta investigación científica de alto nivel que haya múltiples bolsas, que haya múltiples formas de pensar la historia y la memoria, múltiples historias si se quiere, que nos permitan complejizar un poco las lecturas que a veces tenemos sobre el pasado para poder tener unos referentes de futuro muchísimo más interesantes, mucho más diversos y mucho más acordes con lo que somos como nación colombiana”, relató Caicedo.

Por esta razón la mirada está puesta en proteger el patrimonio arqueológico, en garantizar un valor cultural para Colombia en aras de mostrar un relato más local que europeo.