Austria.

La novena sinfonía de Beethoven cumple dos siglos. La famosa composición fue presentada por primera vez en Viena el 7 de mayo de 1824, pero gran parte de la misma fue compuesta en esta vivienda de Baden, hoy conocida como Casa Beethoven, y reconvertida en un museo.

Siempre se supo que esta casa es considerada la casa de la novena porque Beethoven también trabajó aquí en la novena sinfonía. Hay varios testimonios contemporáneos de eso, incluidos bocetos en sus notas musicales, pero también hay cartas que escribió aquí en Baden el 5 de septiembre de 1823, cuando estaba en el balneario, indicando que estaba trabajando en la finalización de la novena sinfonía”, contó Ulrike Scholda, directora de la Casa Beethoven en la cercana Baden.

El compositor se alojó varias veces aquí en los veranos previos al estreno de la novena, encargada por la sociedad filarmónica de Londres. Por esa época, Beethoven padecía varios problemas de salud, desde dolores abdominales a ictericia, pero sobre todo, ya sufría la pérdida de audición.

“Eso fue también lo increíble del estreno. Había estado trabajando en esta obra durante tanto tiempo, luego se interpretó, él estaba allí, pero en realidad ya no la oyó, pero debió de ser algo muy especial poder componer, tener tantas voces, tantos instrumentos, darles las notas y componer una obra tan grande. Eso es algo verdaderamente único, y la gente aquí experimenta un poco eso y creo que puede entender un poco mejor lo especial que era su talento”, destacó Ulrike Scholda, directora de la Casa Beethoven en la cercana Baden.

Casi el doble de larga que otras piezas comparables, la novena sinfonía rompió las normas de lo que hasta entonces se entendía como un género exclusivamente de orquesta, al integrar la voz humana y por lo tanto letra. Y desde 1985, La ‘Oda a la alegría’ del cuarto movimiento de la Sinfonía se ha convertido en el himno oficial de la Unión Europea. 

Para mí representa el humanismo global, algo que necesitamos especialmente en este momento deberíamos escuchar más Beethoven en vez de librar guerras”, comentó Jochen Hallof, visitante.

Para celebrar el aniversario estaban previstas interpretaciones de la famosa Sinfonía en destacadas salas de conciertos en París, Milán y por supuesto, Viena.