EE. UU.
Las personas lo vemos todo turbio dentro del agua, y es que el agua es más densa que el aire: dentro del agua, el haz de la luz se rompe y se retarda. La imagen se sitúa así detrás de la retina y se vuelve turbia.
¿Y en el caso de los peces? Sus ojos poseen una lente redondeada y dura. Eso les permite verlo todo claro a un metro de distancia. Para mirar más lejos retraen toda esa mente hacia dentro del ojo. Los ojos están muy separados entre sí, lo que les presta una visión panorámica.
Además, los peces perciben la luz ultravioleta. Eso les permite distinguir mejor a sus presas en el agua oscura. Dentro del agua, está claro que los peces se ven mejor que las personas.
Por: Deutsche Welle.
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