Reino Unido.

Un vistazo al futuro próximo de los desplazamientos. Este es el aspecto que podrían tener los centros de distribución de taxis voladores en los próximos dos años. El llamado “Vertiport” funcionará como un aeropuerto, con puertas de seguridad y una sala de espera, y transportaría a los futuros pasajeros de una ciudad a otra.

“Lo importante es demostrar cuanto antes cómo estos vehículos de los que todo el mundo ha oído hablar -taxis voladores, coches voladores, drones de carga, drones logísticos- todo el mundo se pregunta también cómo va a funcionar todo esto. ¿Se congestionarán los cielos? ¿Estarán realmente ocupados con los drones? Bueno, la respuesta es no, siempre y cuando haya una infraestructura coordinada en tierra. Y por eso estamos preparando el camino, literalmente, poniendo la infraestructura en marcha”, explicó el fundador de Urban Air-Port, Ricky Sandhu.

Ya existe un “Vertiport”, que sirve para lanzar drones al cielo. Pero la empresa que lo diseñó, Urban Air-Port, también pretende adaptarlo a los taxis voladores para 2024. Tiene previsto construir 200 instalaciones similares en todo el mundo en los próximos cinco años.

“Se acerca el futuro de un segmento de la aviación. Estará aquí a finales de esta década. Y creo que en la década de 2030 empezará a ser omnipresente”, declaró Michael Whitaker, director comercial de Supernal. Esta empresa pretende explotar estos centros. Y afirma que estos taxis voladores serán eléctricos, silenciosos y tendrán la capacidad de transportar a cuatro pasajeros. Pero tendrán un precio elevado. La construcción de uno de estos puertos costará entre 6 y 12 millones de euros.