Panamá. 

La Convención Interamericana para la Protección y Conservación de las Tortugas Marinas (COP 10 CIT), comenzó este miércoles una reunión de tres días en Panamá, con la presencia de casi una veintena de países y el objetivo de ahondar los esfuerzos que protejan a estas especies amenazadas.

«Hoy comienza esta importante COP para la región, con la participación de 20 países, y se discutirán temas sensibles en relación a la protección y conservación de todas las tortugas de nuestros litorales», dijo a Efe el ministro de Ambiente de Panamá, Milciades Concepción.

Unos 16 países de América estarán reunidos hasta el próximo viernes en Ciudad de Panamá para intercambiar información sobre la situación de los quelonios en todo el continente.

Concepción explicó que debatirán sobre cooperación, protección de algunas especies específicas, incorporación a las comunidades en «temas» de conservación y protección, y la economía azul, que es aquella que reconoce el valor de los océanos y mares como motor de crecimiento económico.

«Estas COP fortalecen la cooperación internacional y también recomiendan a cada uno de los países emitir normas más restrictivas» en favor de las especies, agregó el líder de la cartera de medio ambiente.

Concepción defendió que Panamá tiene un conjunto de leyes y programas que protegen a las tortugas marinas.

«Panamá tiene una ley de protección de las tortugas del año 2008 y varias normas. Es uno de los países que tiene programas en específicos con las comunidades incorporadas a la protección de la tortuga», y también «hay criaderos en las costas, y las comunidades y ONG están participando activamente», apuntó.

«Cada vez los países están acordando normas más restrictivas porque estas son una especie que en todo el mundo va desapareciendo», concluyó.

La Convención Interamericana para la Protección y Conservación de las Tortugas Marinas es un tratado intergubernamental que provee el marco legal para que América tome acción en favor de estas especies, constituye un esquema multilateral de cooperación para la protección de tortugas marinas, abre la posibilidad de su aprovechamiento sostenible y se plantea como alternativa a las sanciones comerciales unilaterales, según la información oficial.