Guadalajara, Jalisco.

Como parte de las actividades del Festival Internacional de Cine en Guadalajara se llevó a cabo el panel “Medioambiente, sociedad y cine”.

En el, voces expertas, reunidas por el British Council, el Raindance Film Festival, el FICG y el Museo de Ciencias Ambientales exploraron cómo el cine puede ayudar a crear conciencia ambiental y social.

Uno de los participantes fue Max Keegan, director de la película “The Shepherd and the Bear”, que se encuentra en competencia para el Premio de Cine Socioambiental del FICG.

Esta película está ambientada en los Pirineos franceses y explora el conflicto provocado por la reintroducción de osos pardos en una comunidad pastoril tradicional. En ella, un pastor anciano lucha por encontrar un sucesor mientras los osos depredan su rebaño.

Para Keegan el filmar esta película amplió su perspectiva conociendo la realidad de quienes habitan los Pirineos.

El panel también contó con la presencia del Director General del Museo de Ciencias Ambientales, Eduardo Santana, quien reconoció la importancia de hacer películas como la de Max para crear una conciencia ecológica.

Además, dió aportaciones para contextualizar un poco sobre la situación actual del mundo “Estamos causando la sexta crisis de extinción en la historia de la vida del planeta”. Y también hizo un llamado a la acción “Organícense, trabajen en equipo, infórmense y actúen”.

Rodolfo Castillo-Morales, director de programación documental del FICG fue el encargado de moderar la charla conectando la mirada que Max Keegan plantea en su película con el punto de vista contextual y general de Eduardo Santana.

Una de las intersecciones se dio cuando Rodolfo planteó la idea de “ecosistemas” y cómo a veces se nos olvida que vivimos en ellos ignorando algunos espacios.

Para Max esto cobró sentido pues el espacio donde se desarrolla su película puede ser considerado uno de ellos. Mientras que Eduardo comentó que lo que plantea la película de Keegan era un ejemplo de lo que sucede en el mundo actual recordando la extinción de culturas locales, modos de vida sustentables y la extinción de especies.

Para finalizar, el público tuvo oportunidad de hacer preguntas en donde el común denominador fue reconocer la importancia de hacer cine que ayude a crear conciencia ambiental y que además sea congruente para que cuando se produzca, el impacto ambiental que provoque, sea mínimo.

Por: Viviana Gutiérrez