El 25 de abril es el día mundial de la malaria o paludismo, enfermedad que ha sido subestimada, pues vio un aumento del 12 por ciento en 12 meses en el número de muertes, debido principalmente a las «interrupciones» en el acceso a la atención sanitaria relacionadas con la pandemia de COVID-19.

A pesar de la reciente introducción de una vacuna dirigida especialmente para los niños, la malaria causó la muerte de 627 mil personas en todo el mundo en 2020, según una estimación de la Organización Mundial de la Salud (OMS).

«Hoy sabemos que para luchar mejor contra la malaria es necesario centrarse en los países que tienen el mayor número de casos, especialmente en África y brindar de diferentes herramientas adaptadas a su situación epidemiológica», explicó el director ejecutivo de UNITAID, el doctor Philippe Duneton.

La OMS ha indicado que la mitad de la población mundial corre el riesgo de contraer la malaria, y que los niños menores de cinco años representan el grupo más vulnerable. En 2020, se registraron 241 millones de casos de malaria en todo el mundo.