México.

La Facultad de Ciencias de la Electrónica de la Benemérita Universidad Autónoma de Puebla (BUAP), participa en el Proyecto Tobacco, una colaboración internacional que se realiza en conjunto con los laboratorios franceses GIPSA-Lab en la ciudad de Grenoble e ICUBE-INSA en la ciudad de Estrasburgo, y cuyo objetivo es el desarrollo de algoritmos de control y de inteligencia artificial para su aplicación en distintos modelos de drones.

La idea es que dichos algoritmos permiten un control colaborativo de estos vehículos aéreos no tripulados para su uso en situaciones de emergencia, por ejemplo, que sean medios de carga en terremotos, huracanes u otros desastres naturales.

“Uno de los grandes ejemplos que tenemos cuando existe un desastre es que necesitamos transportar una carga de un punto a otro. Esta carga pueden ser precisamente algunas medicinas que necesite una persona en el rescate. Entonces un solo vehículo sería imposible de transportar. Pero si tenemos dos, tres, cuatro o diez, sí que podemos transportar, por ejemplo, un botiquín con cuestiones para emergencias”, explicó el Dr. José Guerrero.

“Claramente lo que tratamos de hacer es que los vehículos aéreos no tripulados colaboren junto con el menor intercambio posible de información en un contexto donde no se sabe todo”, explicó el Dr. Nicolas Marchand.

Drones que funcionen con el menor intercambio de información

Es por ello que los algoritmos desarrollados son robustos para tomar en cuenta situaciones como la pérdida de comunicación entre los drones o las perturbaciones del ambiente que lo rodea, como agua, viento, golpes que pueden recibir, etcétera.

“Cuando estamos frente a un terremoto, lo primero  que pasa es que las comunicaciones se pierden. Este tipo de dispositivos, este tipo de algoritmos, lo que buscamos posteriormente es que el mismo dron o el mismo conjunto de drones sean aquellos que van a permitir montar la red de comunicación local para que se pueda atender las emergencias en ese momento”, detalló Guerra.

Los resultados son científicos y hay unos que están en el Congreso Nacional de México, y también hay unos que son internacionales en  conferencias y en revistas.

En la BUAP tienen bastante experiencia en los sistemas electrónicos y sobre todo la modelización y una buena parte de control y también de diseño de observadores para sistemas como drones.

“El tipo de vehículos que estamos empleando son denominados de despegue y aterrizaje vertical, tal vez como es este caso, debido a la practicidad que se tiene para ocuparlos en aéreas de vuelo. Y también en exteriores y en interiores para poder hacer experimentos”, contó el estudiante, Argel Vega.

Actualmente los resultados de este proyecto han sido favorables y ya se han hecho pruebas experimentales de vuelo a nivel laboratorio.

Por: BUAP.