Tokio, Japón.
Japón aprobó este miércoles la primera legislación del país en materia de desarrollo y uso de inteligencia artificial (IA) para abordar los peligros que entraña el empleo inadecuado de esta tecnología, como la difusión de información falsa o los ‘deepfake’, aunque no ha incluido disposiciones penales.
La legislación se ha desarrollado con base en los reglamentos actualmente existentes a nivel internacional en materia de IA para evitar daños como la violación de derechos e intereses del público, según explicó en su momento el Gobierno central.
La nueva ley establece que, si bien la IA es una de las bases del desarrollo socioeconómico, también tiene potencial para la comisión de delitos y fomentar la infracción de derechos de autor, así como la filtración de datos personales, por lo que establece una serie de medidas para garantizar un uso seguro.
En virtud de la normativa, el Gobierno podrá abrir una investigación en caso de que suceda algo grave vinculado a la IA y, en función de los resultados, brindará orientación y asesoramiento a las empresas, además de proporcionar información al público.
La ley no estipula ningún tipo de sanción y en casos en los que existan sospechas de un delito se usarán otras normativas vigentes para abordar el problema, como el Código Penal o la Ley de Derechos de Autor.
Contra los ‘deepfake’
Ante el creciente número de delitos en los que se ha visto involucrado el uso de IA para crear imágenes y vídeos de contenido pornográfico, el Parlamento japonés ha aprobado otra resolución complementaria que exige adoptar medidas más enérgicas contra los ‘deepfake’, contenido digital manipulado con IA para imitar o reemplazar la apariencia o la voz de una persona real.
La nueva ley señala también que será un ente del Gobierno el que establezca unas directrices básicas para promover la investigación, el desarrollo y el uso adecuados de la IA, así como para mejorar la competitividad de las empresas niponas a nivel internacional.
La normativa define a la IA como «una tecnología importante para la seguridad nacional», poco explotada en el país hasta el momento.
De acuerdo al último Libro Blanco de Información y Comunicaciones del Ministerio del Interior, sólo un 9 % de los japoneses está habituado a usar IA, frente al 56 % de los chinos o el 45 % de los estadounidenses, y sólo en la mitad de las empresas niponas se usa IA generativa, frente al 85 % de Estados Unidos y el 84 % de China.
Tokio está invirtiendo unos 700 millones de dólares en infraestructura y otros recursos vinculados con la IA, unas diez veces menos que Pekín y casi mil veces menos que Washington, según una encuesta de la Universidad de Stanford (EE.UU.).