Francia.

El arte contemporáneo y las tecnologías de inteligencia artificial convergen en una nueva exposición en París que estará abierta al público hasta finales de septiembre. Bajo el título, ‘El mundo a través de la IA’, la muestra, inaugurada en el centro de Jeu de Paume, es la más extensa dedicada hasta ahora a las tecnologías generativas y reúne más de 40 propuestas de artistas internacionales.

Entre los artistas participantes, Joan Fontcuberta, revisita su célebre ‘Herbario’ de 1983 con una nueva versión creada por la IA, la obra, ahora titulada   ‘eHerbario’, presenta imágenes de plantas en blanco y negro que dialogan con el legado de la fotografía científica del siglo XX, cuestionando su fidelidad representativa.

“Entonces, nos damos cuenta de que esa naturaleza artificial puede existir más allá de nuestra propia experiencia. En realidad yo no quiero engañar al espectador, algunas unas imágenes son verosímiles, pero hay algunas unas que tienen pequeños detalles absolutamente desquiciados, delirantes, que ponen en guardia la mirada crítica del observador hasta el punto de darse cuenta de que eso, de que toda imagen en el fondo es una construcción y, por lo tanto, necesita un esfuerzo de lectura, un esfuerzo de interpretación”, comentó el artista.

El colectivo catalán Estampa también participa con dos propuestas. En ‘Ekphrasis’, varios algoritmos analizan escenas icónicas del cine, generando interpretaciones estéticas y emocionales. Mientras que en  ‘Repetition penalty’ exploran los límites de la generación textual automática, resaltando patrones poéticos no intencionados.

Esta muestra va más allá de las creaciones visuales y advierte sobre los peligros de estas tecnologías. La obra ‘Faces of ImageNet’, del artista Trevor Plagen, evidencia cómo los sistemas de reconocimiento facial simplifican y estereotipan la diversidad humana. La exposición, comisariada por Antonio Somaini y Ada Ackerman, destaca tanto el potencial creativo como los riesgos de la IA. Obras como la de Justine Emard, que reimagina el arte rupestre con herramientas digitales, muestra el diálogo entre el pasado y el futuro.