México.

Los trabajos en el predio ubicado en la calle de Guatemala número 24, iniciaron en el año 2015 y fue un proyecto de salvamento arqueológico. “Ya había ciertas nociones de que se podría encontrar el Huey Tzompantli, el gran Tzompantli, el Muro de Cráneos”, explicó el arqueólogo Raúl Barrera, del proyecto de Arqueología Urbana del INAH.

En 2015 se encontró primero el muro de la fachada de la plataforma, no obstante, encontrar una plataforma no era suficiente para pensar que es el Tzompantli.

“Teníamos que encontrar los indicadores que fueran muy claros de que este edificio era el Tzompantli y no otra plataforma. Fue así que se comenzó a excavar en la superficie de esta plataforma y comenzamos a detectar las huellas de poste donde se colocaba la empalizada y se encontró la torre de cráneos, como la describe el cronista Andrés de Tapia”, detalló la arqueóloga Lorena Vázquez, del proyecto de Arqueología Urbana del INAH.

Hay tres etapas constructivas definidas acerca de este edificio y que quizás lo que se ha detectado corresponde a la época del gobierno de Moctezuma 1ro, más o menos desde 1440 hasta la llegada de los españoles. La primera hipótesis de trabajo es que todas las personas que están aquí son individuos que fueron obtenidos gracias al sistema de guerras, de conquista y de sometimiento de otros pueblos que tenía el imperio mexica.

“Sabemos por fuentes históricas que en su gran mayoría eran guerreros que fueron capturados, que fueron traídos a la ciudad de Tenochtitlán y fueron sacrificados, mientras que, en el templo mayor, se les extraía el corazón y la sangre, y eran ofrendado a sus dioses, en particular al dios de la guerra, que era Huitzilopochtli, deidad solar”, compartió Barrera.

También es posible que haya individuos obtenidos a partir de que se sometía a un pueblo, y las personas que vivían en ese lugar había mujeres, niños, en fin. Y es posible que algunos de esos se trajesen también para sacrificarse. Pero también se sabe que se tributaban individuos, así como se tributan mantas de algodón, maíz, cacao, etcétera. Pues, así como se tributaba todo esto, pues también se tributaban individuos para el sacrificio.

Por: C14.