Argentina.
Aunque se estima que el volumen de plástico reciclado en el mundo se multiplicará por cinco entre 2020 y 2060, apenas el 29% de estos residuos tendrá una segunda vida, mientras que casi el 50% terminará en vertederos incontrolados, según proyecciones ambientales globales. Frente a esta problemática, Argentina impulsa una solución innovadora que busca darle un nuevo uso al plástico descartado, especialmente en el sector agrícola.
El proyecto «Sosteniendo Vides Circulares» propone la creación de postes para viñedos elaborados con plástico 100% reciclado, priorizando residuos de un solo uso como envases vacíos de agroquímicos y flejes provenientes de la industria vitivinícola.
La iniciativa no solo busca reducir el impacto ambiental del sector vitivinícola, sino también promover un modelo de desarrollo sostenible de triple impacto. Desde el punto de vista económico, se revaloriza un desecho que antes no tenía salida comercial. Ambientalmente, se evita la tala de bosques nativos al sustituir la madera por plástico reciclado, contribuyendo a la mitigación del cambio climático. Socialmente, el proyecto contempla la inclusión de recuperadores y recuperadoras urbanas, integrándolos a la cadena productiva y generando empleo.
Los residuos plásticos son procesados mediante un sistema de triple lavado que garantiza su reutilización segura, particularmente en el caso de envases que contenían fitosanitarios. El resultado es un producto duradero, resistente y alineado con los principios de la economía circular.
Con esta propuesta, el proyecto no solo busca cambiar la forma en que se sostienen las vides, sino también el modo en que se piensa la producción agrícola en clave ambiental y social. Un paso firme hacia la sostenibilidad en una de las industrias más representativas del país.
Por: Señal U.